Dos de los proyectos de infraestructura que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció como prioritarios al inicio de su administración tendrán incrementos presupuestales en 2021, aún después de la crisis económica derivada de la pandemia de coronavirus.
El aeropuerto Felipe Ángeles en la base militar de Santa Lucía tendrá 283% más recursos en términos reales para el próximo año, al pasar de 5 mil millones de pesos de presupuesto en 2020 a más de 21 mil 314 millones de pesos para 2021, de acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos entregado ayer en la Cámara de Diputados.
El Tren Maya tendrá 44% más presupuesto en términos reales. Mientras en 2020 le fue aprobado un presupuesto por 24 mil 440 millones de pesos, para este 2021 el Ejecutivo prevé 36 mil 287 millones de pesos.
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En tanto, la Refinería Dos Bocas que se construye en Tabasco tendrá una reducción de 6% en términos reales. En 2020 tuvo 46 mil 225 millones de pesos de presupuesto y para 2021 se prevé 45 mil 050 millones de pesos.
Sin embargo, aún con esa reducción, el presupuesto es comparable con los 42 mil 737 millones de pesos que recibirá la UNAM en 2021 para atender a 360 mil alumnos, 41 mil académicos y 4 mil investigadores, además de mantener escuelas, institutos, recintos culturales y de investigación científica.
El presupuesto para el aeropuerto Felipe Ángeles en este año equivale a casi tres veces el presupuesto de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) que el próximo año tendría 7 mil 800 millones de pesos.
De hecho, por el aeropuerto, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), encargada de la obra, registra un aumento en su presupuesto, pues en el rubro proyectos de Infraestructura gubernamental de seguridad nacional pasó de 6 mil 540 millones de presupuesto en 2020 a 21 mil 814 millones en 2021.
De acuerdo con la justificación del proyecto de presupuesto, se prevé que la obra concluirá en marzo de 2022 y tendrá un costo total de 84 mil 956 millones de pesos, según el proyecto de 2021. Aunque en el presupuesto de 2020 se preveía un costo total de la obra de 82 mil 136 millones de pesos.
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El presupuesto del próximo año servirá para continuar con la construcción de la pista central del aeropuerto, plataformas y calles de rodaje; se seguirá con la construcción de la terminal de pasajeros, la construcción de las instalaciones de la Autoridad Aeroportuaria, el Centro de Operación, la Interconexión vial tramo Caseta Tultepec-Santa Lucía y las obras complementarias y adquisición del equipamiento para la operación.
La obra atenderá a 18 millones de pasajeros al iniciar sus operaciones y a largo plazo se estima que provea servicios anuales a 100 millones de pasajeros. Operará con dos pistas paralelas, una de uso comercial y una pista de uso militar y con una terminal de pasajeros, una de carga, y la infraestructura.
En tanto, el Tren Maya, “representa la propuesta más importante de infraestructura turística y de transporte para la región sur-sureste del país”, de acuerdo con la justificación del proyecto de Presupuesto.
Con los 36 mil 288 millones de pesos proyectados para 2021 se prevé continuar con la elaboración del proyecto ejecutivo, construcción de Vía Férrea, supervisión técnica, verificación de control de calidad, y elaborar los estudios técnicos para los Tramos 5 Cancún – Tulum y Tramo 6 Tulum – Bacalar del Tren Maya.
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También para la adquisición de material rodante que incluye 30 locomotoras y 180 carros de pasajeros; estaciones y talleres, y la adquisición del ancho de la franja de 40 metros por concepto de derecho de vía dado que existen asentamientos irregulares a lo largo del recorrido de los tramos mencionados, y la compra de riel.
Según el proyecto, la obra generará “un impacto directo en el empleo al contribuir en la creación de 379 mil empleos directos y 113 mil empleos indirectos, impacto en la protección del medio ambiente y el ordenamiento territorial”.
El Tren Maya incluye la construcción de 1,502 kilómetros de vía férrea, 30 estaciones en Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán y conectará las principales ciudades y circuitos turísticos de la zona maya.
“Su objetivo es reducir significativamente los costos de transporte de pasajeros y de carga en la región, crear nuevos polos de desarrollo y propiciar el establecimiento de industrias que aprovechen las nuevas ventajas de conectividad de la zona”, según el proyecto.
