La mañana de este lunes, el fiscal de Guanajuato, Carlos Zamarripa, dio a conocer todos los detalles de la captura de “El Comandante Emilio”, un secuestrador que recibió 60 años de prisión.
De acuerdo con lo dicho por el titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), “El Comandante Emilio”, identificado como Raúl “N” tenía una forma peculiar de llevar a cabo sus secuestros.
Él, junto con sus cómplices cubrían su rostro y protegían sus manos cuando privaban de la libertad a sus víctimas. Asimismo, usaban vehículos robados para trasladarlas.
La última persona a la que secuestraron fue Nancy Michelle Kendall, el 13 de marzo del 2017. Según lo informado, la francoamericana fue levantada en la calle Mar de Calavera en San Miguel de Allende.
Zamarripa también señaló que “El Comandante Emilio”, quien es originario de Chile, solía tener complejas negociaciones a través de aparatos que eran casi imposibles de rastrear para las autoridades.
Asimismo, detalló que mantenía cautivas a las víctimas entre siete meses y hasta un año y medio, posteriormente las dejaba ir.
A través de unas imágenes, el titular de la Fiscalía mostró a la prensa el domicilio al que llevaban a las víctimas, así como un espacio en donde las encerraban, el cual estaba rodeado de esponja y telas para aislar el ruido.
Para liberar a los cautivos, el grupo de secuestradores exigían fuertes sumas de dinero a las familias y las debían entregar en dólares.
La detención
El funcionario mencionó que Raúl “N” fue detenido a finales de mayo del 2017 en flagrancia cuando seguía a un taxista al que le había encomendado entregar una caja que contenía un mensaje y un dedo de la víctima como señal de vida.
El conductor de la unidad se percató de la situación extraña por lo que dio aviso a las autoridades.
“El taxista dio aviso de que era vigilado, con la sospecha de que se trataba de algo extraño y en las inmediaciones de una bencinera se detuvo el líder del grupo, ‘Comandante Emilio’, instancia en que se le detuvo en plena flagrancia”, aseguró Carlos Zamarripa.
Antes de su captura, Raúl “N” pudo advertir a sus cómplices, quienes se encargaron de desmantelar el lugar en el que operaban y liberar a la mujer.
Al momento de la captura, el detenido se presentó con una identidad falsa. Las autoridades informaron que se trataba de Raúl “N”, un exgerrillero de Chile quien era buscado por el asesinato de un político en la década de los 90. Por ello, contaba con una ficha emitida por la interpol para ser buscado en varios países.
Después de su captura, la FGR lo llevó ante un juez, quien le formuló imputación por la comisión de los hechos que la ley señala como delito de secuestro agravado, logrando que fuera vinculado a proceso penal.
La sentencia
La tarde del pasado viernes, durante una audiencia final le fue dictada una condena de 60 años de prisión a “El comandante Emilio”, por la comisión del delito de secuestro agravado.
El tribunal del juicio oral aseguró que el señalado permanecerá recluido sin ningún beneficio de ley. Asimismo, le fue impuesta una multa por 320 mil 160 pesos y el pago de 50 mil pesos por daños materiales y 110 mil pesos por daño moral.