Las autoridades sanitarias de Estados Unidos detectaron desde 2013 niveles altos de arsénico en el agua mineral Peñafiel producida en México, aunque la empresa afirma que el producto analizado no estaba etiquetado para su venta fuera del país.
Documentos obtenidos por la organización Consumer Reports muestran que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) ordenó una inspección a R.R. Importaciones luego de que una prueba del gobierno de Nueva Jersey encontró 21.1 partes por billón (ppb) de arsénico en el agua Peñafiel.
Según el informe de la FDA, el presidente de la importadora dijo que el producto era “para una actividad personal, sin planes de vender el producto”, pero un año después se le ordenó que destruyera 63 paquetes debido a los altos niveles de arsénico.
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Katie Gilroy, directora de comunicaciones corporativas de Keurig Dr Pepper, la empresa dueña de Peñafiel, dijo a Consumer Reports que compañía no estaba importando a Peñafiel a Estados Unidos durante el período de la prueba de Nueva Jersey.
“Por lo tanto, el producto al que se hace referencia en esos informes se importó ilegalmente en los Estados Unidos, y se etiquetó y se formuló para la venta únicamente en México”, dice Gilroy.
“Como no éramos los importadores de este producto, ninguna autoridad nos informó de las pruebas”, añadió.
Gilroy dijo a la organización que en 2013 el límite en México para el arsénico en el agua embotellada fue de 25 ppb, y como tal, “los hallazgos de los reguladores de Nueva York en las pruebas de 2013 … indican que el producto importado ilegalmente dentro de los límites regulatorios mexicanos”.
La organización acusa que a pesar de los reportes, ni la compañía ni la FDA han emitido un retiro del producto, “que todavía está disponible para la venta en línea y en las tiendas” del país.
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Keuring Dr Pepper, la compañía dueña de Peñafiel, reconoció el jueves que el agua mineral que se produce en México sí contiene niveles elevados de arsénico y anunció la suspensión temporal en dos plantas del país.
Por su parte, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) anunció que a raíz del informe solicitó información a la empresa y verificará el producto que se vende en el país.
“Se harán estudios de laboratorio para verificar que el producto que se está distribuyendo sea saludable para los consumidores”, señaló la dependencia en un comunicado.