Las políticas de Facebook en contra de los desnudos volvieron a generar polémica, esta vez al censurar una representación del cuadro francés “La libertad guiando al pueblo”, pintado por Eugène Delacroix, en el que aparece una mujer con los pechos desnudos enarbolando una bandera francesa y que estuvo en los billetes de 100 francos.
Jocelyn Fiorina, el director de “Disparos en la calle Saint-Roch” dijo a la AFP que había utilizado la pintura para promocionar su obra, pero “un cuarto de hora después del lanzamiento de la publicidad, la administración [de la red social] bloqueó nuestra difusión asegurando que no se podía publicar una imagen de desnudo”.
Fiorina publicó después una nueva publicidad con el mismo cuadro al que añadió el rótulo “censurado por Facebook” para tapar los pechos de la mujer.
Ante esto, Elodie Lacris de Facebook en Francia emitió un comunicado en el que se disculpa por la censura al cuadro y afirmó que la publicidad patrocinada del director de teatro “está aprobada en adelante”.
“Para proteger la integridad de nuestro servicio, verificamos millones de imágenes de publicidad cada semana y algunas veces cometemos errores”, dijo.
Sin embargo, esta no es la primera vez que Facebook censura contenidos históricos o artísticos. A principios de mes se disculpó por la censura reciente de una representación de la “Venus de Willendorf”, una escultura de casi 30,000 años de antigüedad, considerada una obra maestra del arte paleolítico.
La Venus de Willendorf, que representa una figura femenina desnuda y voluptuosa, fue hallada en el pueblo austriaco homónimo a comienzos del siglo XX y es “la representación prehistórica de una mujer más popular y la más conocida del mundo”, dijo entonces el Museo de Historia Natural (NHM) de Viena, que posee la estatua.
Este jueves, informó AFP, la justicia francesa desestimó la demanda de un internauta que reprochaba a Facebook haber cerrado su cuenta por publicar una foto del cuadro “El origen del mundo”, de Gustave Courbet, que representa un sexo femenino.
El tribunal reconoció sin embargo “una falta de Facebook”, que ejerció “su derecho de anulación sin preaviso razonable” y “sin precisar los motivos de esa desactivación” de cuenta.