Jesús Carlos Ortega Urrea se convirtió en el primer mexicano condenado a muerte en China por el delito de narcotráfico.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México informó que Ortega recibió la condena de la corte china el pasado 2 de diciembre, luego de permanecer en prisión 5 años
Ortega fue acusado por la justicia asiática de producir y comercializar al menos una tonelada de metanfetaminas y cafeína distribuidas en Japón, Australia, Indonesia y varias regiones de China.
El decomiso y la detención del mexicano supuso para la justicia el mayor golpe contra el tráfico de estupefacientes en China en los últimos 70 años, según reportes de la prensa asiática.
En China la pena de muerte es aplicable regularmente en casos de tráfico de drogas a gran escala, como en el que está involucrado Jesús Carlos Ortega Urrea.
Ortega y otro mexicano llegaron a China en 2012 donde instalaron un laboratorio de drogas sintéticas, Meses después la policía local realizó una redada en la que fue capturado, reportó la prensa mexicana.
Desde hace poco más de cinco años la Secretaría de Relaciones Exteriores de México (SRE) ha seguido el caso, brindado asistencia consular y acompañado a los familiares del imputado durante las audiencias correspondientes en el país asiático, según el expediente SIPC: 720-04(CHN)48.
Hasta 2015, el mayor número de casos atendidos por la SRE, ligados al narcotráfico, habían sido en Asia. En el caso de China, ocho mexicanos se encontraban detenidos; un caso más en la India y otro en Indonesia.
En 2008, en Malasia, tres hermanos mexicanos, originarios de Sinaloa, fueron sentenciados a muerte por haberlos encontrado con 29 kilogramos de metanfetamina.
Desde 2012, la SRE ha atendido 543 casos de pena de muerte para connacionales, de los cuales, en 186 se ha logrado revertir la sentencia.