¿Fiscalización sin representación?
No importa de qué colonia procedan, pero los residentes de Baja California tendrán que pagar más impuestos cuando vayan de compras al condado de San Diego si se aprueban las propuestas de ley que estarán en la boleta electoral el próximo 8 de noviembre.
La elección presidencial acapara la atención del mundo especialmente por la sorpresa que dio Donald Trump al lograr la candidatura de los republicanos y enfrentarse en una sucia batalla electoral contra Hillary Clinton, abanderada del partido demócrata.
A nivel local, los sandieguinos decidirán diversas medidas que sin duda afectarán a quienes cruzan la frontera desde México.
De las 35 propuestas de ley que estarán en la boleta, hay algunas que pretenden aumentar impuestos.
Algunas son gravámenes al consumo, —algo similar al IVA que pagan del lado mexicano— y otras al hospedarse en algún hotel.
Del total de iniciativas, dos pertenecen al condado y 33 a otras ciudades de San Diego.
Hay además otras 17 a nivel estatal y más de 700 candidatos, desde el presidente hasta funcionarios de municipalidades en California.
Son tantas la alternativas de candidatos y propuestas, que por primera vez en la historia de California, la boleta será de dos hojas tamaño oficio con opciones en ambos lados.
Lo que también abunda este año, son los votantes.
Alex Padilla, Secretario de Estado, dice que nunca antes hubo tantos electores registrados: “En primer lugar la elección presidencial, ha despertado un interés sin precedentes en California, y luego están algunas de las proposiciones (o iniciativas estatales) y alguno de los candidatos”.
California tiene 38 millones de residentes, de estos, 18 millones 200 mil ya se registraron y podrán votar el próximo mes.
Lo mismo pasa en el condado, de acuerdo con la portavoz del registro electoral, Mariana Bustamante.
“Tenemos un número sin precedentes de electores registrados y al parecer la mayoría tiene pensado participar esta vez”, indica.
En San Diego, se han registrado más de un millón y medio de electores. El condado tiene tres millones 300 mil residentes.
Tradicionalmente muchos se empadronan al final, así que la Oficina de Registro espera por lo menos otros 100 mil electores para los últimos días, pues la fecha límite para registrarse y poder votar es el 24 de octubre.
Lo que decidan los electores del lado estadounidense tendrá repercusiones para el gasto de sus vecinos del sur, quienes representan billones de dólares anualmente en la economía californiana.
La interacción binacional genera esta dinámica a la que pocos parecen ponerle atención. Si aumentan los impuestos, raramente se protesta. Muy frecuentemente el comprador mexicano ni cuenta se da que hay diferencia al comprar en una tienda de la ciudad de Chula Vista o en una de la municipalidad de San Diego con distinto porcentaje de impuestos.
La Proposición A aumentaría medio centavo al impuesto de ventas, de 8 a 8.5%, durante 40 años. Los fondos servirían para reparar calles, mejorar la infraestructura y así mejorar la atención a los ancianos, personas con discapacidad y veteranos, además de prevenir incendios y mejorar el ambiente, entre otros asuntos.
Chula Vista propone un incremento adicional de medio centavo a los impuestos de venta durante 10 años para mejorar calles y banquetas, drenaje, y actualizar el sistema telefónico de emergencias 911.
También la ciudad de Del Mar considera incrementar mediopenny por la mayoría de las compras.
Además, el martes 8 de noviembre podrían optar por aumentar los impuestos al tabaco.
Una propone aumentar medio centavo de dólar a los impuestos de venta de los cigarros. La otra propuesta consiste en incrementar en dos dólares el precio de la cajetilla.
No es raro que los norteamericanos aprovechen su viaje a Tijuana o Ensenada y se surtan de cigarros que ya son mucho más baratos en México.
Aunque hay restricciones en la cantidad que se puede transportar al cruzar la frontera rumbo al norte, no sería raro que de aprobarse el gravamen de dos dólares en California, haya casos de personas que intenten comprar más tabaco en Tijuana.
La Proposición 56 sugiere aumentar los impuestos a los cigarros, de 87 centavos de dólar a 2.87 dólares. El aumento, aplicable a cigarros convencionales y electrónicos. Lo recaudado financiará programas de salud contra el tabaquismo, programas de desarrollo temprano infantil, prevención e investigaciones sobre tabaquismo.
Y hablando de fumar, en la boleta existen también iniciativas para el consumo de marihuana. Algunas ciudades del condado están pidiendo a los ciudadanos autorización para establecer dispensarios de marihuana medicinal en donde hoy están prohibidos.
Sin embargo, la principal propuesta es legalizar el consumo recreativo en todo el estado.
Adicionalmente, la Proposición C de San Diego, también tendría un impacto en los bajacalifornianos, pues aunque no menciona directamente aSan Diego Chargers, propone incrementar la capacidad hotelera de San Diego en un 6% para conseguir fondos con los que la ciudad pueda asumir el compromiso de tener un equipo profesional de fútbol americano por los próximos 30 años.
Es una de dos propuestas que consideran cobrar más en impuestos al rentar una habitación de hotel en la que se considera una de las mejores ciudades de América.
Los mexicanos saben que la sucesión presidencial norteamericana impactará su vida aún de este lado, ya sea por las políticas anti-inmigrantes de Donald Trump o las dudas de Hillary Clinton sobre los tratados de libre comercio.
Localmente, recibirán el impacto en sus bolsillos, si los votantes en la elección, avalan los nuevos impuestos locales. Muy parecido a lo que sucedió cuando le aumentaron el IVA a los fronterizos del 11 al 16%.
A final de cuentas, el aumento en San Diego lo dejaría muy por debajo de ese nivel, ya que en California con todo y los aumentos, no subiría ni al 9% de impuestos.