Las localidades de Gütersloh y Warendorf en Alemania fueron nuevamente puestas en estricto confinamiento debido a un rebrote en el matadero del grupo Toennies, donde ya se han detectado a más de 1,500 trabajadores contagiados.
Las autoridades del estado de Renania del Norte-Westfalia, donde pertenecen estas localidades, decidieron limitar los desplazamientos y las actividades durante una semana para intentar contener la propagación del virus.
Este reconfinamiento, previsto hasta el 30 de junio, se traducirá en una reducción de contactos entre las personas, cierre de bares, cines, museos y prohibición de actividades de ocio en espacios cerrados. Los restaurantes podrán abrir pero también con limitaciones.
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“Por primera vez en Renania del Norte-Westfalia y en Alemania, vamos a volver en toda una localidad a las medidas que se aplicaban hace algunas semanas”, indicó Armin Laschet, el dirigente de la región más poblada y más industrializada del país, durante una conferencia de prensa en Düsseldorf.
Según Laschet, ya se han desplegado cientos de de agentes de la policía para garantizar el cumplimiento de las restricciones impuestas a los más de 6,000 trabajadores de esa planta cárnica.
Los agentes también darán ayuda humanitaria a los ciudadanos afectados por el confinamiento. El dirigente del estado ha señalado que se enviarán intérpretes polacos, rumanos y búlgaros a la zona, ya que muchos de los empleados del matadero son ciudadanos de Europa del Este.
Desde su cuenta de Twitter, Laschet dijo que el confinamiento “ya se ha puesto en marcha” en el distrito de Gutersloh y que implica el cierre de los colegios y de las guarderías.
Las medidas incluyen una cuarentena para todos los trabajadores del matadero de Toennies y para las personas “no contagiadas” que estuvieron en contacto con los profesionales de la planta cárnica.
El Instituto Robert Koch, la agencia gubernamental alemana encargada del seguimiento de enfermedades infecciosas, ha desplegado su personal en el distrito para vigilar el brote y dar recomendaciones.
El balance actualizado de Alemania es de 190,862 positivos por COVID-19 y 8,895 víctimas mortales. Del total de casos, 175,700 corresponden a pacientes que se han recuperado, tras recibir el alta 400 enfermos desde el balance anterior.
Más de la mitad de los casos confirmados corresponden a tres estados: Baviera (47,894, con 2,571 fallecidos), Renania del Norte-Westfalia (41,418, con 1,665 fallecidos) y Baden-Wurtemberg (35,365, con 1,826 fallecidos).
Con información de AFP y Europa Press.
