Al menos 22 personas murieron este martes en un atentado suicida cerca de un mitin del presidente Ashraf Ghani, en plena campaña electoral para su reelección.
Un segundo fue cometido en el centro de Kabul, cerca de un centro de reclutamiento del ejército. Ambos fueron reivindicados por los talibanes, que consideran ilegítimas las elecciones presidenciales previstas el 28 de septiembre y prometieron boicotearlas.
En el primer atentado, perpetrado por un kamikaze en moto, murieron 22 personas y hubo 38 heridos. Entre las víctimas hay mujeres y niños, según fuentes médicas.
Lee más: Las 4 claves sobre los ataques a plantas petroleras en Arabia Saudita
Según Wahida Shahkar, una portavoz de la provincia, “la explosión tuvo lugar cuando el señor Ghani se dirigía a sus partidarios, está sano y salvo”. La portavoz explicó que nadie de su equipo se vio afectado.
La explosión en el centro de Kabul tuvo lugar cerca de la embajada estadounidense y del lugar de otro atentado reivindicado por los talibanes el 5 de septiembre, que dejó 12 muertos.
En el otro ataque suicida cometido este martes en la provincia de Parwan fallecieron al menos 26 personas
Entérate: EU vs Irán: ¿Qué está pasando en el Medio Oriente?
Los talibanes, en su reivindicación de los dos ataques, recordaron que habían advertido a la población de que no participara en los mitines electorales.
“Lo habíamos avisado. Si ahora sufren bajas es su responsabilidad”, señalaron en un comunicado.
Este ataque es el más sangriento desde que comenzó la campaña electoral a finales de julio. Aquel día, un atentado contra las oficinas de un partido político próximo a Ghani dejó un saldo de 20 muertos.
Expertos y observadores coinciden en que existe un alto riesgo de que la violencia aumente debido a la reciente decisión del presidente estadounidense Donald Trump de cortar sus negociaciones los talibanes para una retirada progresiva de las fuerzas estadounidenses, después de que un soldado norteamericano muriera en un atentado en Kabul el 5 de septiembre.