En medio del bullicioso ambiente previo al Gran Premio de Austria 2025, Max Verstappen sorprendió con un mensaje cargado de respeto y nostalgia hacia su excompañero de equipo Sergio “Checo” Pérez, quien se encuentra fuera del circuito tras su salida de Red Bull. Lejos de alimentar rumores o controversias, el tricampeón mundial envió un gesto de camaradería que alimenta las versiones sobre un posible regreso del piloto mexicano al “Gran Circo”.
“Tengo muchas ganas de volver a verlo en el paddock pronto, y todavía necesito regalarle un casco mío. Se lo prometí porque me regaló uno suyo con un mensaje muy bonito, y le prometí que ojalá, en México, le pueda regalar uno mío”, reveló Verstappen a RacingNews365.
El neerlandés destacó además que mantiene una buena relación con Pérez, pese a los desencuentros que surgieron durante su tiempo como compañeros en Red Bull:
“Tengo una gran relación con Checo, fuimos grandes compañeros de equipo y por eso tengo mucho respeto por él. Él tiene mucho respeto por mí, y eso es todo por mi parte”.
¿EL MINISTRO DE DEFENSA REGRESA?
Aunque Checo Pérez aún no ha confirmado oficialmente su futuro en la Fórmula 1, varias versiones en el paddock y medios especializados apuntan a que su regreso podría ser cuestión de tiempo. Algunos insiders de la F1 especulan que escuderías como Williams, Haas e incluso Aston Martin podrían considerar sumar al tapatío a sus filas de cara a la temporada 2026, justo cuando entren en vigor los nuevos reglamentos técnicos y motores híbridos de próxima generación.
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En su podcast Desde el Paddock, Checo compartió una anécdota que refleja las tensiones internas con Verstappen, pero también su resolución:
“Max tenía un problema conmigo y me lo dijo hasta ocho meses después. Luego lo hablamos y se arregló todo. Pero así es él, se aguanta las cosas hasta que finalmente las suelta, generalmente en la pista”.
Esta sinceridad refuerza la percepción de que, pese a los altibajos, la relación entre ambos se mantiene firme, lo cual podría allanar el camino para que el mexicano se reintegre a un equipo competitivo, ya sea como titular o incluso como parte del staff técnico o de desarrollo, una opción que también suena en los pasillos del paddock.
VERSTAPPEN EVITA POLÉMICAS Y SE CUIDA ANTE SANCIONES
Mientras tanto, Max Verstappen enfrenta su propio reto: evitar una sanción que podría dejarlo fuera de un Gran Premio. El neerlandés acumula 11 puntos de penalización en su superlicencia, y alcanzar 12 lo dejaría automáticamente suspendido. Si logra una carrera “limpia” en Austria, se le descontarán dos puntos, lo que bajaría su cuenta a nueve.
Ante preguntas sobre si las actuales regulaciones han quitado “naturalidad” a las carreras de F1, Verstappen optó por la cautela:
“No voy a comentar sobre eso, no puedo arriesgarme a que me penalicen”.
Su respuesta refleja la tensión con la FIA en torno a sanciones disciplinarias, que este año han estado bajo mayor escrutinio por parte de los equipos y pilotos.
EL LEGADO DEL MEJOR PILOTO MEXICANO DE LA F1
Para Checo Pérez, el gesto de Verstappen y el cariño de la afición mundial son evidencia de su impacto en la Fórmula 1. Su experiencia, su papel crucial en momentos clave para Red Bull, y su arraigo con el público mexicano lo mantienen como uno de los pilotos más queridos y con potencial para regresar por la puerta grande.
¿Será el Gran Premio de México el escenario del esperado reencuentro? Verstappen, al menos, ya lo visualiza: “Ojalá le pueda dar el casco en México”.
Por ahora, la Fórmula 1 se alista para un fin de semana intenso en Austria, con los focos puestos tanto en la pista como en las conversaciones que podrían definir la parrilla del 2026. Y en medio de todo, el nombre de Checo Pérez sigue siendo parte clave del relato. N