En un acto que reafirma su compromiso con la diversidad cultural y el respeto por las raíces vivas de México, Banco Azteca y Fundación Azteca se suman a la realización del Quinto Festival Nacional de Máscaras Danzantes (FENAMAD), que tendrá lugar del 14 al 16 de noviembre en Coscomatepec de Bravo, Veracruz, con la participación de más de mil 500 danzantes tradicionales, 300 músicos y 80 maestros mascareros provenientes de distintas regiones del país.
Durante la presentación oficial celebrada en el Auditorio Jaime Torres Bodet del Museo Nacional de Antropología, la organización reafirmó su respaldo a las comunidades indígenas y a las expresiones rituales que aún hoy transmiten cosmovisiones milenarias mediante el arte corporal y el simbolismo de las máscaras.
“Cada máscara es una historia tallada, una enseñanza heredada, una identidad que se preserva”, señaló el maestro mascarero Alejandro Vera Guzmán, en representación de los artesanos que mantienen vivas estas tradiciones.
La Vicepresidenta del Comité Ejecutivo de Grupo Salinas, Ninfa Salinas Sada, destacó que el respaldo de Fundación y Banco Azteca a este festival representa una forma activa de promover la identidad nacional desde un enfoque socialmente responsable: “En Grupo Salinas creemos profundamente que la cultura es un vehículo de libertad, identidad y prosperidad. Apoyar a las comunidades, a los artistas y a nuestras tradiciones es también una forma de transformar positivamente a México.”
Este tipo de iniciativas tiene el objetivo de celebrar el patrimonio intangible de las comunidades originarias, al mismo tiempo que generan un impacto económico local significativo. Según la Cuenta Satélite de la Cultura de México del INEGI, las actividades culturales representaron el 2.9% del PIB nacional durante 2024, lo que equivale a más de 700 mil millones de pesos en valor agregado bruto, y dieron empleo a más de 1.3 millones de personas.
El FENAMAD es mucho más que un festival artístico: es un espacio de resistencia cultural, donde los pueblos originarios expresan, a través del cuerpo, la música y la máscara, una visión del mundo que ha resistido siglos de invisibilización.
Para Banco Azteca, apoyar esta plataforma significa fortalecer los lazos comunitarios, revalorar el conocimiento ancestral y ofrecer nuevas narrativas de inclusión, orgullo e identidad.
“Las máscaras danzan porque en ellas habitan las voces de nuestros pueblos. Este festival es un acto de celebración y reencuentro con lo que somos”, declaró Manuel Álvarez, director del FENAMAD.