En pleno siglo XXI, a pesar de los avances tecnológicos y científicos, tres cuartas partes de las bacterias carecen de un solo artículo que las aborde; solo unas 20 especies han sido objeto de estudio, mientras que la mayoría permanecen ignoradas. Microorganismos modelo como Escherichia coli (E. coli) monopolizan la atención de la comunidad científica, dejando al resto sumidas en lo desconocido.
“En un estudio, Paul Jensen, biólogo de sistemas microbianos de la Universidad de Michigan en Ann Arbor, Estados Unidos, descubrió que solo 10 especies bacterianas representan la mitad de todas las publicaciones, mientras que casi tres cuartas partes de todas las bacterias nombradas no tienen un solo artículo dedicado a ellas”, refiere Nature en un artículo.
Para el biólogo, los microbios importantes para la salud humana y de la Tierra están “especialmente poco estudiados”. A tenor de la revista académica, las cinco especies de bacterias más conocidas son: E.coli, Estafilococo aureus, Pseudomonas aeruginosa, Mycobacterium tuberculosis y Helicobacter pylori.
Para cuantificar el sesgo de la microbiología hacia un pequeño número de organismos modelo, Jensen consultó una base de datos de 43,409 especies bacterianas únicas y contó la cantidad de artículos indexados por PubMed. Este último es un repositorio de literatura biomédica administrado por el gobierno de Estados Unidos, que menciona cada especie en el título o el resumen.
EL ESTUDIO DE LA BACTERIAS: LA E.COLI POR DELANTE
Como era de esperar, la E. coli se situó en el primer puesto con más de 312,000 publicaciones, 21 por ciento del total. El resto de la lista estuvo formado principalmente por patógenos humanos como el Helicobacter pylori, un microbio estomacal que puede provocar úlceras e incluso cáncer.
“Pero 74 por ciento de las especies bacterianas no se mencionaban en el título o resumen de ningún artículo indexado”, refiere Nature.
Aunado a lo anterior, los microbios que se encuentran en diversos ecosistemas como los océanos y el suelo, también están notoriamente poco estudiados, según Brett Baker, ecólogo microbiano de la Universidad de Texas en Austin.
“Ninguno de los organismos dominantes en la naturaleza está en esta lista. Eso es un problema”, apunta.
Según los investigadores, corregir el sesgo de publicación de la bacteriología no será fácil, pero será necesario hacerlo para aprovechar los beneficios de los estudios del microbioma. Uno de los desafíos es cultivar microbios poco estudiados en el laboratorio: la E. coli se hizo popular, en parte, porque crece fácilmente, afirma el medio académico.
De acuerdo con la Clínica Mayo, la E.coli vive en los intestinos de las personas y de los animales sanos. La mayoría de las variedades de Escherichia coli son inofensivas o causan diarrea breve. Sin embargo, algunas cepas, como la Escherichia coli O157:H7, pueden causar cólicos abdominales intensos, diarrea con sangre y vómitos. Los signos y síntomas de la infección suelen aparecer tres o cuatro días después de la exposición a la bacteria. N