En Hawái los equipos de rescate siguen buscando este miércoles 16 de agosto entre los escombros a los sobrevivientes del devastador incendio. Hasta ahora se contabilizan 106 muertos, para cuya identificación se instaló una morgue provisional.
El gobernador del archipiélago, Josh Green, ya advirtió varias veces que el balance final del incendio que arrasó la semana pasada la ciudad de Lahaina —el más mortífero de Estados Unidos en más de un siglo— podría incluso “duplicarse”.
DOS MEXICANOS MUERTOS POR INCENDIO EN HAWÁI
Entre los fallecidos figuran dos mexicanos, según la cancillería, que informó: “La Secretaría de Relaciones Exteriores informa sobre el lamentable fallecimiento de dos personas mexicanas a causa de los incendios forestales en la isla Maui, en Hawái, y expresa su más sentido pésame a familiares y amistades”.
El comunicado añade: “Personal del Consulado General de México en San Francisco que se encuentra en la isla ya está en contacto con las familias para brindarles la asistencia y el acompañamiento necesarios. De igual forma, ya están en comunicación con las autoridades locales para confirmar los procedimientos y protocolos a seguir, a partir de la situación de emergencia que todavía permea en la isla”.
Hasta la fecha, solo un cuarto de la zona siniestrada en Lahaina, en el litoral oeste de la isla de Maui, ha sido rastreada por perros entrenados en tareas de búsqueda de cuerpos, según Green. Unos contenedores refrigerados fueron instalados en la isla, a modo de morgue provisional. Además, personal del Ministerio de Salud se instaló en la zona para agilizar el complicado proceso de identificación de las víctimas, constató un periodista de la AFP.
“EL OCÉANO ME SALVÓ”, CUENTA UNA SOBREVIVIENTE
En medio de la tragedia sobresale la historia de una sobreviviente a quien fue el océano el que la salvó. Cuando se vio rodeada por las llamas en el malecón de Lahaina, en Hawái, Annelise Cochran, una nadadora experimentada dedicada a la conservación oceánica, no lo pensó dos veces: lanzarse al mar era su única alternativa.
“Fue algo de segundos, ni sentí que tomaba una decisión porque en ese momento no tenía otra opción”, dijo Cochran a la AFP seis días después de sobrevivir al voraz incendio forestal que arrasó esta pequeña comunidad turística en la costa oeste de Maui.
La joven de 30 años, que trabaja para la organización sin fines de lucro Pacific Whale Foundation, perdió su apartamento, auto, mascota, vecinos y amigos en la tragedia que ya dejó más de 1,000 desaparecidos.
Ella sobrevivió tras horas de incertidumbre y agonía. Sus conocimientos del mar le pagaron con creces. “Me siento muy afortunada de tener esa conexión con el océano porque creo que me ayudó a mantenerme a salvo aquella noche. El océano me salvó la vida”.
El martes 8 de agosto era como cualquier otro en este archipiélago estadounidense, recuerda Cochran. Un incendio amenazaba desde la montaña que enmarca Lahaina, pero avisos de contención total de las llamas la tranquilizaron. Sin embargo, la agonía comenzó poco después de las 15 horas cuando sintió olor a quemado.
“EL AIRE ERA MUY AGRIO”
“No había humo, pensamos que tal vez eran las cenizas que venían de la montaña por el incendio de la mañana”, dijo la joven a las afueras del Complejo Memorial de Guerra, en Kahului, donde está refugiada desde la tragedia. Sin alertas ni órdenes de evacuación, ella y sus vecinos reaccionaron al ver el cielo teñirse de negro por el humo. “Vimos las llamas y entendimos que venía en nuestra dirección”.
Cochran corrió por su bolso, un álbum de recuerdos y fotos, y su pájaro (que falleció en el escape), y entró a su auto. “Todo era negro como el carbón. No podía ver más de una pulgada frente a mi parabrisas”.
Avanzó algunos metros en dirección de la Front Street, la principal calle de Lahaina, y que da de cara al transitado malecón. “Vi un enjambre de autos. La gente los abandonó en la calle y comenzó a correr”, dijo Cochran.
“Fue cuando entendí que nadie me iba a rescatar, al menos no en un buen tiempo”. Cochran encontró allí a dos de sus vecinos, y supo que las llamas les pisaban los talones cuando los carros abandonados comenzaron a explotar. Asustada, decidió lanzarse al mar junto a su vecina Edna para protegerse de las brasas.
LA MUJER SE AFERRÓ A LAS ROCAS Y A LA VIDA DURANTE EL INCENDIO EN HAWÁI
“Nos sumergimos completamente, mantuvimos nuestros rostros lo más abajo posible al punto de respirar apenas en la superficie del agua porque el aire era muy agrio”. Poco después vieron que su otro vecino ya no se movía. Las mujeres se aferraron al muro de rocas que bordea el fin del malecón de Lahaina. Pero tras varias horas en el mar y agobiadas por el humo, comenzaron a perder consciencia y a sufrir alucinaciones.
“Cuando el agua golpeaba mi cara, volvía en mí y caía en la cuenta de dónde estaba (…) Hay varios periodos que no recuerdo de aquella noche”. Cochran consiguió llamar al servicio de emergencia a las 21:30 horas desde su teléfono, protegido en el muro de piedras. “Pero nos dijeron que no había forma de rescatarnos aún”.
Alrededor de las 23:00 horas vieron un barco de la Guardia Costera rescatando decenas de personas que estaban mar adentro, pero la embarcación no tenía cómo acercarse a la empedrada costa, por lo que la espera junto a su vecina y unas 40 personas continuó.
CINCO HORAS SUMERGIDA HASTA EL CUELLO
“Pasaron unas ocho horas hasta que pude soltar la pared de piedras y abandonar la Front Street. Y de esas ocho horas, diría que pasé al menos cinco completamente sumergida hasta el cuello tratando de protegerme”.
La mujer añade: “Pero de a ratos era tan frío que teníamos que subir al muro y acercarnos al fuego para calentarnos. Es una de las razones por las cuales estoy llena de heridas y quemaduras”, dice señalando los muchos raspones en sus piernas y brazos.
Los sobrevivientes finalmente fueron rescatados sobre la medianoche por los bomberos, quienes los llevaron a un comercio próximo que sobrevivió al infierno. Luego los trasladaron a un refugio en la madrugada.
La joven, que piensa volver a casa de sus padres en Washington para procesar lo vivido, dice que la comunidad de Lahaina está “muy enfadada” con sus autoridades. “Lo que ocurrió, en mi opinión, roza la negligencia (…) Solo estoy aquí porque me encargué yo misma”.
BIDEN VISITARÁ LA ZONA DEL INCENDIO EN HAWÁI
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden y su esposa Jill viajarán el próximo lunes a la isla. El mandatario se “reunirá allí con socorristas, supervivientes y funcionarios”, anunció su portavoz Karine Jean-Pierre en un comunicado. Biden quiere evaluar en persona “el impacto de los incendios” y hablar de “los próximos pasos” en las operaciones de rescate.
El presidente demócrata dirige “una respuesta de todo el gobierno” federal y “se ha comprometido a proporcionar a la gente de Hawái todo lo que necesita”, dijo su portavoz. La Casa Blanca estima que las operaciones de búsqueda de víctimas habrán alcanzado la próxima semana un grado que permita una visita presidencial, la cual moviliza importantes recursos logísticos y de seguridad. N
(Con información de AFP)