El día de hoy el Papa Francisco llegó a Lisboa, capital de Portugal, para reunirse con más de 1 millón de jóvenes de todo el mundo que se han congregado para la Jornada Mundial de la Juventud, (JMJ), la número 15 desde la que convocó San Juan Pablo II en Buenos Aires en 1987.
El Papa de 86 años de edad ha presidido las JMJ en Brasil, Polonia, Panamá, y ahora en Portugal. A estas jornadas llegan jóvenes de todos los rincones del mundo para participar en pláticas y ceremonias religiosas durante seis días, del 1 al 6 de agosto, algunas de ellas celebradas por el Santo Padre como el viacrucis del viernes por la noche, la adoración al Santísimo Sacramento el sábado y la Misa de Envío el domingo por la mañana.
El sábado temprano el Papa argentino visitará a la Virgen de Fátima trasladándose en helicóptero en un vuelo que durará 50 minutos. En la capilla de las apariciones rezará el rosario con jóvenes enfermos antes de regresar a Lisboa por la tarde.
También se reunirá, como acostumbra hacerlo en sus viajes internacionales, con miembros de la Compañía de Jesús, Jesuitas como él, para intercambiar opiniones sobre diversos temas. Por la noche del sábado dirigirá a los jóvenes en la oración ante el Santísimo Sacramento.
Se calcula que para la misa del domingo el número de jóvenes pudiera aproximarse a los dos millones, uno más de los que ya se encuentran en Lisboa procedentes de 184 países del mundo. N