El Semáforo de Alerta del volcán Popocatépetl se encuentra en “Amarillo Fase 3”. El Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) exhorta a “no acercarse al volcán y, sobre todo, al cráter, por el peligro que implica la caída de fragmentos balísticos”.
En la 81ª reunión del Comité Científico Asesor del volcán Popocatépetl efectuada este fin de semana y con base en el análisis de la información disponible de los últimos días, “se recomendó cambiar la fase del Semáforo de Alerta Volcánica de Amarillo fase 2 a Amarillo fase 3, lo cual constituye una medida preventiva ante los cambios observados”, indicó el Cenapred.
POSIBILIDAD DE EXPLOSIONES
Se trata del nivel previo al rojo de alta peligrosidad, dividido también en dos fases, explicó la coordinadora del organismo, Laura Velázquez, en rueda de prensa. En las últimas 24 horas, mediante los sistemas de monitoreo del volcán Popocatépetl, se detectaron 31 exhalaciones acompañadas de vapor de agua, gases volcánicos y ceniza. Adicionalmente se contabilizaron 1,136 minutos de tremor y seis explosiones.
El Cenapred reitera enfáticamente la recomendación de “no ascender al cráter del volcán, porque existe la posibilidad de que ocurran explosiones, como se ha visto en varias ocasiones en el pasado, que implican la emisión de fragmentos incandescentes. Por lo que se insiste en respetar el radio de exclusión de 12 km. Así mismo en caso de lluvias fuertes, alejarse de los fondos de barrancas por el peligro de flujos de lodo y escombro”.
EL VOLCÁN POPOCATÉPETL REACTIVÓ SUS ERUPCIONES EN 1994
El Popocatépetl, cuyo proceso eruptivo se reactivó en diciembre de 1994, se ubica en los límites de los estados de México, Morelos y Puebla. La capital de Puebla amaneció este domingo cubierta de una capa gris, observó un reportero de la AFP.
Durante la nueva fase se prevé una “actividad eruptiva de explosividad a baja intensidad”, por lo que pueden esperarse “explosiones leves a moderadas que lancen fragmentos en el entorno del cráter”, lluvia de ceniza en poblaciones aledañas y en algunas ciudades lejanas y “riesgo para la aviación”.
EL INCREMENTO DE ALERTA
El incremento de la alerta, que se produce por recomendación de un comité científico, obliga a autoridades y organismos de socorro a preparar personal, equipos de evacuación y albergues ante una eventual emergencia. Asimismo, las autoridades tendrán que adoptar medidas para evitar afectaciones por caída de ceniza y fragmentos materiales.
Decenas de albergues ya fueron habilitados en la zona cercana al volcán, que desde la noche del pasado viernes incrementó su actividad con exhalaciones y explosiones moderadas, acompañadas de emisión de ceniza y fragmentos incandescentes en las cercanías del cráter. Los gobiernos de los estados de Puebla y Tlaxcala suspendieron clases presenciales de todos los niveles educativos ante la caída de ceniza. N