En la consulta ortopédica y de manera habitual en los padecimientos de espalda o columna vertebral, es muy común recomendar dentro de los cuidados preventivos y como parte del tratamiento o rehabilitación, la práctica de natación; sin embargo, aún surgen cuestionamientos acerca de su efectividad, por lo que especialistas del Centro de la Columna Vertebral revelan si es un mito o una realidad que este deporte contribuye a aliviar el dolor de espalda.
Debido a su efecto antigravitacional en las articulaciones de carga, la natación y otros tipos de hidroterapia, a decir por el médico Rodolfo Moctezuma del Centro de la Columna Vertebral, pueden ser beneficiosos para disminuir y tratar el dolor de espalda, así como para diversos padecimientos en la columna vertebral y el fortalecimiento del cuello.
“En general destacan los beneficios de esta modalidad de ejercicio, por ser dinámico y global, puesto que involucra prácticamente todo el sistema musculoesquelético, además del cardiovascular”, revela Moctezuma.
Una de las características que hacen del agua un buen aliado para la espalda, dice Rodolfo Moctezuma, es su densidad natural, la cual añade resistencia a las actividades de nado, lo que proporciona un beneficio adicional para prevenir nuevas lesiones.
Sin embargo, como cualquier actividad, el médico del Centro de la Columna Vertebral hace hincapié en la prescripción de un especialista, quien deberá indicar el tipo de disciplina a desempeñar de acuerdo al padecimiento.
“De no llevarse a cabo de manera adecuada o bajo la indicación de un especialista, la natación puede ser causa de lesiones y origen de dolor para los pacientes en rehabilitación, disminuyendo en el primer caso su rendimiento y en el segundo, retrasando o incluso complicando su proceso de reintegración funcional”, asegura Moctezuma.
A su vez, el médico especialista recomienda realizar ejercicios acuáticos dirigidos a la zona específica a tratar, así como la supervisión de un terapeuta para su buena ejecución. Asimismo, considera que cada paciente debe saber cuáles son los factores de riesgo que conlleva esta disciplina y los cuidados que debe tener para su pronta recuperación.
“La indicación correcta para estos pacientes es iniciar un programa de actividades acuáticas supervisadas con el objetivo de liberar la presión articular a la que se somete el cuerpo por la gravedad, combinando movimientos específicos y analíticos para un beneficio real de esta terapia y minimizar riesgos”, asegura el médico del Centro de la Columna Vertebral.
Para obtener los beneficios esperados al practicar natación, subraya Rodolfo Moctezuma, se debe investigar acerca de la biomecánica para entender los ejercicios que realmente son buenos para la columna vertebral, “puesto que existen distintas técnicas de nado como crol, braza y espalda y dependiendo de la técnica adecuada al realizarlas, pueden beneficiar, perjudicar o incluso agravar las lesiones existentes”.
“Recomendar la natación como primera opción para padecimientos de espalda debe ser con precaución. Los especialistas deben ser específicos ante pacientes inexpertos, ya que sin una orientación adecuada podrían exacerbar sus lesiones o interrumpir su recuperación”.
A lo largo de más de 24 años, el Centro de la Columna Vertebral ha atendido de forma integral en sus sucursales de Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey, Querétaro, Puebla y Estado de Mexico, a más de 30 mil pacientes con padecimientos y lesiones en espalda y columna vertebral sin tratamientos invasivos ni cirugías como el Método Ovando Sanders.
“En el Centro de la Columna Vertebral creemos firmemente en la evolución de la medicina y la tecnología, que derivan en maravillosos procedimientos como el Método Ovando Sanders, que tiene como cualidad no ser invasivo, brindar seguridad, constituirse como una opción de vanguardia y tener un costo hasta 15 veces más económico que procedimiento quirúrgico”, puntualiza Rodolfo Moctezuma.
*BC