LA ORGANIZACIÓN Panamericana de la Salud (OPS) advirtió este miércoles que Cuba reportó “aumentos dramáticos” de casos de covid-19 en algunas provincias, aunque aclaró que la isla caribeña ya experimentaba un alza de contagios antes de las protestas ocurridas recientemente en la isla.
“En el Caribe, los casos de covid-19 y las muertes están aumentando en Cuba, donde muchas provincias informan aumentos dramáticos de nuevas infecciones”, dijo en rueda de prensa Carissa Etienne, directora de la OPS.
La situación es “especialmente aguda” en la provincia turística de Matanzas, donde se encuentra Varadero, el principal balneario de Cuba, dijo.
El director de Emergencias en Salud de la OPS, Ciro Ugarte, informó que Cuba registró el mayor número de contagios semanales en todo el país desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020.
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“Se notificaron más de 43,000 casos, lo cual representa un incremento del 21 por ciento (con respecto a la semana anterior), con un promedio de 6,199 casos diarios”, señaló y destacó la circulación de la variante Delta “en varias provincias del país”.
“Es una situación preocupante”, afirmó Ugarte. “La incidencia del covid-19 en Cuba todavía está en el nivel más alto”.
Sin embargo, no vinculó este pico a las manifestaciones populares que estallaron el 11 de julio en unas 40 ciudades de Cuba. “El número de casos en Cuba había ido en aumento antes de las recientes protestas”, aclaró.
Aunque las autoridades cubanas intentan vacunar al 70 por ciento de su población para agosto, Cuba no se adhirió al programa de distribución global de vacunas Covax, patrocinado por la OMS y gestionado por la OPS en Latinoamérica. Pero empezó a inmunizar a su población a mediados de mayo con dos candidatas a vacunas desarrolladas en la isla.
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Ugarte dijo que hasta el 17 de julio, unos 3.3 millones de personas habían recibido al menos una dosis de las candidatas vacunales Abdala o Soberana, administradas en el marco de intervenciones sanitarias autorizadas.
“Eso es aproximadamente el 30 por ciento de la población, por lo que todavía es un nivel bajo”, precisó, e insistió en el cumplimiento de todas las medidas de salud pública recomendadas para evitar la propagación del virus.
La crisis sanitaria se suma a la crisis social denunciada por las protestas de miles de personas que salieron a las calles de 40 ciudades, el 11 de julio. Esas manifestaciones dejaron un muerto, decenas de heridos y más de un centenar de detenidos. N
