CUATRO LEGENDARIOS anillos “milagrosos” fueron encontrados mientras se realizaban trabajos de restauración en Galicia, España.
Los anillos, que aún no han sido autentificados, se encontraron durante la restauración del monasterio de Santo Estevo de Ribas de Sil, en Nogueira de Ramuin, Ourense.
Los trabajos de restauración se realizaban en el altar, donde se encontró una urna entre los restos de nueve obispos.
Dentro de uno de los cuatro compartimientos de la urna se encontró lo que se cree que es una bolsa de seda bordada con hilos de oro, en cuyo interior estaban los anillos.
Se piensa que los anillos de plata pertenecieron a los nueve obispos y existe la creencia de que poseen poderes milagrosos de curación.
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De acuerdo con la Diócesis de Ourense, los nueve obispos eran tan importantes y apreciados por los milagros que realizaban, que el monasterio guardaba celosamente sus restos. Sin embargo, se pensaba que los anillos estaban perdidos… hasta ahora.
Junto con los anillos, dentro de la bolsa también había piedras y dos documentos, en uno de los cuales se lee: “Estos cuatro anillos son de los que quedaron de los nueve santos obispos. Son los que han quedado. Los demás desaparecieron. Por ellos se pasa agua para los enfermos, y sanan a muchos”.
Luis Manuel Cuña Ramos, delegado episcopal del patrimonio y los bienes culturales de la Diócesis de Ourense, declaró a La Voz de Galicia que los anillos son sencillos y están hechos de plata mezclada con otro metal.
LOS ANILLOS SERÁN AUTENTIFICADOS
La bolsa en cuyo interior se encontraron estaba cubierta de polvo derivado de los trabajos realizados previamente en la iglesia.
Los anillos serán autentificados por equipos de restauración de la Delegación de Patrimonio de la Xunta de Galicia y del Museo del Vaticano.
Investigadores de joyería medieval y de textiles antiguos también ayudarán a autentificar los anillos.
En una extraña coincidencia, los anillos se encontraron en el mismo lugar en el que se hallan en una novela. En el libro El bosque de los cuatro vientos, de María Oruña, la protagonista busca los anillos y los encuentra exactamente donde fueron hallados en la vida real.
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En el diario La Región se informó que, según Oruña, “nadie se creía en la leyenda, y que aparezcan ahora reliquias legitima el trabajo de documentación que hay detrás”.
La escritora también destacó los paralelismos entre la ficción y la realidad, e indicó que “Amelia, el personaje que encuentra los anillos, está basado en Vania López, la restauradora del proyecto y la persona que también los ha descubierto en la realidad”, y en el libro, el sitio donde busca los anillos “es precisamente el lugar en el que aparecieron”.
En Twitter, Oruña dijo acerca del descubrimiento de los anillos: “Todos sabían que los nueve obispos reposaban en Santo Estevo. Muy pocos creían en la leyenda de sus anillos milagrosos. Ahora, completando el círculo que comenzó hace 1,000 años, emerge la leyenda”. N
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek