El Museo Antropológico de Viena, Austria, señaló que el penacho de Moctezuma es demasiado frágil, y que no contemplan trasladarlo en al menos 10 años.
Así lo determinó el curador de las colecciones de Norte y Centroamérica de la institución, Gerard van Bussel, de acuerdo con un reporte del diario Reforma.
El especialista respondió que trasladarlo a México es arriesgado, pues debido a que está hecho principalmente de material orgánico, cualquier vibración en el aire o carretera lo dañaría.
“Me gustaría conocer a la persona dispuesta a asumir esa responsabilidad”, respondió el curador, luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador encomendó a la doctora Beatriz Gutiérrez Müller la “misión casi imposible” de traerlo de regreso para exhibirlo en México.
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Incluso, el curador Van Bussel señaló que dentro del mismo museo no se atreven a moverlo por miedo a que pueda sufrir algún daño.
De hecho, autoridades del museo descartaron que el penacho de Moctezuma sea parte de la exposición “Aztecas”, que iniciará este 15 de octubre y que estará hasta el 13 de abril de 2021.
La recuperación del penacho, o al menos tenerlo en préstamo, ha sido un esfuerzo de distintos gobiernos.
El mandatario mexicano explicó en un post en Twitter que ni siquiera a Maximiliano de Habsburgo, impuesto como emperador de México (1864-1867) durante la invasión francesa, “se lo prestaron”.
El penacho
La pieza es popularmente conocida como “Penacho de Moctezuma” porque pudo pertenecer a Moctezuma Xocoyotzin, emperador azteca de 1502 a 1520.
Pero el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) señala que no hay elementos que lo sustenten y denomina a la pieza, en poder del Museo de Etnología de Viena, “Penacho del México antiguo”.
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De acuerdo con AFP, entre 2010 y 2012, expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) restauraron el penacho formado por 222 plumas de distintas aves montadas sobre una base de oro con incrustaciones de piedras semipreciosas.
Se planteó entonces prestarlo a México y mandar a cambio la carroza de Maximiliano, pero la fragilidad del penacho y el temor de que se maltrate en el traslado detuvieron el convenio.
Tampoco se tiene claro cómo llegó hasta Austria. La hipótesis más probable es que Moctezuma lo obsequió al conquistador español Hernán Cortés, quien lo habría enviado al rey Carlos I de España, de la casa austriaca Habsburgo.
Con información de Animal Político y AFP.
