El ex gobernador de Baja California, José Guadalupe Osuna Millán, levantó este lunes una demanda civil por daño moral y una denuncia penal por abuso de autoridad, en contra del gobernador Jaime Bonilla ante la Fiscalía General de la República (FGR).
La razón es que el 10 de septiembre pasado, Bonilla acusó que Osuna Millán recibió dinero del narcotráfico entre 2007 y 2010, cuando era gobernador.
En su transmisión vía redes sociales, Bonilla exhibió el audio de un supuesto yerno del ex mandatario, quien se identificó como Fred Adrián Ramos Pacheco y relató una supuesta reunión de Osuna Millán en Tijuana con líderes del narcotráfico.
Según Ramos Pacheco, el ex funcionario estatal les ofreció protección a cambio de pagos de hasta medio millón de dólares.
Este lunes, al salir de la FGR, el ex mandatario de extracción panista aseguró a los medios de comunicación que jamás ha visto al autor del audio, y que nunca ha estado en el hotel Pueblo Amigo, donde supuestamente se reunió con los narcotraficantes “el Muletas”, “el Teo” y “la Barbie”.
“Es una campaña de desprestigio. Son infundios”, dijo Osuna Millán.
La demanda y denuncia interpuestas por el ex gobernador son competencia de la Fiscalía General del Estado (FGE), pero las presentó ante la FGR para que el caso sea investigado por la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, que es federal.
“Simplemente por la relación afectiva y de afinidad entre el denunciado y el fiscal de Baja California”, explicó uno de los abogados de Osuna Millán.
La demanda civil es por daño moral y pide la retracción pública de Jaime Bonilla, así como una indemnización, cuyo monto lo tendrá que establecer un juez.
Por otro lado, la denuncia penal es por abuso de autoridad en su modalidad de insulto y vejación a particulares, que según el código penal de Baja California, amerita una sentencia de 4 a 12 años en prisión.