ARTÍCULO DE OPINIÓN
Newsweek Baja California cede este espacio a familiares de víctimas de feminicidio en la entidad. Aquí escriben Arcelia Verduzco y Bertha Calderón. Una es madre y otra es la hermana de Cintia Patricia Calderón Verduzco, una joven que fue asesinada en Tijuana en septiembre de 2016. El texto siguiente fue editado por cuestión de espacio.
*
Mi nombre es Arcelia Verduzco. Hace 3 años y 6 meses lo tenía todo en este mundo para ser feliz. Mi trabajo, tres hijos y cuatro nietos que para mi son mi vida entera.
El hombre al que yo amaba, Omar Sánchez Puente, era tan celoso que no quería ni que mis nietos me abrazaran. Sus celos eran tan enfermizos que me seguía a todas partes. Era una relación insoportable, pero lamentablemente me di cuenta demasiado tarde.
No sabía que Omar, con quien llevaba una relación de 12 años y medio, y a quien mis nietos miraban como un abuelo, planeaba causar el peor daño que se le puede hacer a una madre.
El 15 de septiembre del 2016 ese hombre me quitó un pedazo de mi vida, asesinando de una manera tan cruel a mi niña, Cintia Patricia Calderón Verduzco.
Para mi, para mis hijos y nietos la vida ya no es la misma. El vacío y dolor de no volver a ver a mi niña y la culpa de haber traído a mi vida al hombre que se convirtió en el asesino de mi hija.
Cintia hoy tendría 23 años y sería una licenciada en derecho.
En lugar de eso, es una víctima más en la lista de feminicidios que sigue sin resolverse.
Día con día es más y más larga la espera para que se te haga justicia mientras tu asesino anda como si nada.
Solo espero en Dios que un día pague por todo el sufrimiento que pasaste.
Bertha Calderón, hermana de Cintia, escribe:
Hoy quiero y espero hacer justicia por mi hermana, quien murió hace tres años.
Aún seguimos esperando justicia por parte de las autoridades, que no resuelven nada.
Espero de todo corazón que tu asesino pague el daño que te hizo, porque te alejó de tu familia de la forma más inhumana. Justicia. Sólo pido eso para ti, hermana.