Grecia cerrará en los próximos meses los campamentos de migrantes habilitados en las islas del mar Egeo y los sustituirá por centros de deportación, según ha anunciado este jueves el ministro de Migración heleno, Notis Mitarakis.
“Cerraremos estos campamentos para el verano de 2020”, ha dicho Mitarakis, en declaraciones a la cadena de televisión estatal ERT, después de que miles de personas se manifestaran en contra de estas instalaciones en las islas de Lesbos, Chios, Samos y Kos.
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Creación de los campamentos
Los campamentos fueron creados en el punto álgido de la crisis de refugiados y migrantes en el periodo de 2015 y de 2016 para intentar separar a los solicitantes de asilo de los migrantes económicos pero las instalaciones se han visto cada vez más sobresaturadas.
En virtud del acuerdo entre la Unión Europea y Turquía que se mantiene desde marzo de 2016, los solicitantes de asilo tienen derecho a entrar en la Unión Europea pero el resto de migrantes deben ser devueltos a Turquía. Las llegadas de desplazados, sin embargo, han superado la capacidad de Grecia de tramitar las solicitudes.
El aumento de la cifra de llegadas desde abril ha agravado aún más la situación y, en la actualidad, hay cerca de 40,000 personas atrapadas en las islas del Egeo, lo que supone cerca de seis veces más de la capacidad de las instalaciones.
En aplicación del plan del Gobierno anunciado en 2019, los llamados centros de recepción se convertirán en centros cerrados de deportación y los procedimientos se acelerarán. “Veremos si esto se convierte en una realidad”, ha explicado el alcalde de Vathy, la capital de Samos. “No ha ocurrido nada hasta ahora”, ha añadido.
La mayoría de los migrantes viven fuera de los campamentos oficiales y llenan las calles, aumentando de forma constante en número a pesar del continuo traslado de miles de personas, en su mayoría familias y niños, a la Grecia continental en los últimos meses.