Tras décadas de plantones magisteriales en el zócalo de Oaxaca, mayo de 2019 pasará a la historia como el año en el que los integrantes de la Sección 22 adherida a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), se mantuvieron en sus escuelas.
El movimiento que inició en 1980 por la democratización de los mecanismos de elección de la dirigencia sindical de la gremial educativa, realizó año con año movilizaciones en el mes de mayo, luego de entregar su pliego de demandas a las autoridades el Día del Trabajo, y declarar respuestas insuficientes o nulas (dependiendo del caso) el Día del Maestro.
Las únicas excepciones se registraron a lo largo de 39 años se registraron en 1992 y 1993, cuando la Sección 22 se encontraba bajo el liderazgo de Erangelio Mendoza.
En aquellos años, la base magisterial se abstuvo de la instalación de un campamento en el primer cuadro de la capital oaxaqueña, tras la firma del Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica, que dio como resultado la descentralización de la educación y la creación de institutos o secretarías en los estados.
En los noventa y bajo el gobierno en Oaxaca de Heladio Ramírez López, la Sección 22 obtuvo espacios en puestos de confianza del recién creado Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), que en 2015 les fueron retirados con la recuperación de la rectoría del estado en el IEEPO.
*El todo por el todo
El investigador en Sociología de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (UABJO), Isidoro Yescas Martínez opina que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación obtuvo con el gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador, el triunfo más importante de su historia.
“La CNTE nunca se había sentado a dialogar con un presidente de la República como ocurrió hace unos días con el mandatario federal, quien además les entregó una carta-compromiso que atiende buena parte de las demandas que no fueron incorporadas en la Reforma Constitucional y que serán solventadas en las leyes secundarias o bien, en las seis mesas ya instaladas con el gobierno federal”, explica.
Mientras en los sexenios de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN), no habían sido escuchadas las demandas magisteriales basadas en su pliego de demandas, en este momento se vive otra realidad política, agrega.
“Después de la negociación tan ventajosa que obtuvo la Sección 22 en el 2006, cuando levantó su paro y dejó colgada a la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), con todas las concesiones que les dio gobierno de Felipe Calderón, el mejor trato que han tenido a lo largo de sus casi cuatro décadas de lucha es el de este 2019 con López Obrador”, resalta.
Entre los logros obtenidos con la Cuarta Transformación, apunta, se encuentra la derogación de la Reforma Educativa impulsada por el anterior presidente Enrique Peña Nieto, y los puntos pendientes quedarán solventados en las leyes secundarias o en negociaciones permanentes.
“Desde mi punto de vista han ganado del todo por el todo y no tiene mucho sentido un plantón. La justificación había sido la falta de diálogo y en este momento tienen el triunfo”, resalta.
Agregó que a nivel del gobierno del estado, el magisterio ha obtenido también ventajas, y aunque formalmente no existe una bilateralidad, de facto sí se está llevando a cabo. “Hay acuerdos permanentes entre la dirigencia de la Sección 22, el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO) y una representación del gobierno para atender todas sus demandas”, considera.
*Los más álgidos
El plantón más álgido registrado a lo largo de casi cuatro décadas de protestas magisteriales fue el de 2006, cuando el entonces gobernador Ulises Ruiz Ortiz ordenó el desalojo de los profesores instalados en el primer cuadro de la capital el 14 de junio de ese año.
El hecho desató un movimiento político social de continuas protestas, marchas y manifestaciones en la exigencia de la renuncia del mandatario estatal, mismo que se prolongó durante meses y del que se tienen documentados al menos 23 personas muertas, violaciones a los derechos humanos, encarcelamientos arbitrarios e incluso casos de tortura.
En 2015, tras la recuperación de la rectoría del estado del IEEPO, lo que quitó al magisterio puestos directivos en el Instituto, provocó una serie de movilizaciones que tuvieron el más álgido momento el 19 de junio.
Los profesores fueron desalojados del bloqueo que mantenían en la súper carretera Oaxaca- Cuacnopalan a la altura de Nochixtlán, por las policías que dirigían en el ámbito federal Enrique Peña Nieto y estatal, Gabino Cué Monteagudo.
Los pobladores de esa localidad que celebraba el tradicional mercado, apoyaron a los profesores. El saldo fue de nueve personas muertas y decenas de heridos.