La defensora de los derechos humanos de San Juan Jaltepec, perteneciente al municipio de Santiago Yaveo, Silvia Pérez denunció el desinterés de las autoridades gubernamentales de Oaxaca por atender el conflicto agrario que atraviesa la localidad con sus vecinos de San Antonio, perteneciente a San Juan Lalana.
Señaló que la emboscada que sufrieron pobladores de esa agencia el pasado domingo 3 de marzo, que dejó como saldo dos hombres asesinados, forma parte de una estela de violencia en contra de los habitantes de su comunidad.
“Nadie se imaginó que nuestros vecinos de San Antonio nos atacarían mientras se realizaba un tequio en nuestro territorio”, afirmó la activista.
Sostuvo que tras los lamentables hechos en los que descartó que hubiese personas desaparecidas, fueron convocados por las autoridades gubernamentales a una reunión en la ciudad de Oaxaca.
No obstante, condenó que los habitantes de Jaltepec fueron atendidos por un servidor público que carecía de facultades para tomar decisiones, de tal forma que demandó una audiencia con representantes del gobierno del estado que den una respuesta oportuna.
Resaltó que el conflicto no se solucionará hasta que Santiago Yaveo recupere las seis mil 636 hectáreas que le fueron invadidas, ya que cuentan con títulos de propiedad inclusive desde el Virreinato.
Acusó que en las tierras que le han sido arrebatadas a San Juan Jaltepec se registra la tala indiscriminada de árboles, así como un uso irracional de los recursos naturales que en la zona son muy bastos.
“San Juan Jaltepec es un pueblo indígena zapoteco que vive de y para la tierra, por ello exigimos a las autoridades que de inmediato reconozcan los títulos de propiedad y dejen de causar más problemas”, dijo.
En este sentido señaló que los gobiernos han sido los principales responsables de los conflictos agrarios, al no respetar los títulos de propiedad de los pueblos.
Refirió que en 1979 se registró la primera incursión armada por parte de sus vecinos, en la que cuatro personas fueron asesinadas, mientras que seis resultaron heridas. En 2010, añadió, tuvo lugar un ataque con saldo de dos heridos y en este 2019 de nueva cuenta dos homicidios enlutan a la población.
Afirmó que los caminos a su comunidad se encuentran abiertos, sin embargo, temen en su tránsito debido a que sus vecinos de San Antonio cuentan con armas de grueso calibre.