El desplazamiento forzado de miles de centroamericanos y su tránsito por Chiapas y Oaxaca ha provocado una crisis humanitaria, advirtió el defensor de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, Arturo Peimbert Calvo.
Ante ello, exigió al Estado Mexicano el reconocimiento de este fenómeno que mantiene en situación de vulnerabilidad a niñas, niños, adolescentes, hombres y mujeres que transitan en la caravana migrante.
Y pidió a los organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas y al pueblo mexicano sumarse al llamado para proteger la integridad física y la seguridad de los miles de personas procedentes de Honduras y Guatemala que se encuentran en tránsito.
El ombudmsan oaxaqueño propuso que México convoque a una sesión extraordinaria de la Organización de Estados Americanos (OEA) para asumir la condición de los integrantes de la caravana como desplazados forzados.
“No son sólo imperativos económicos los que obligan a estas poblaciones a marcharse de sus lugares de origen. Debemos reconocer las manifestaciones de violencia que han obligado a muchos de ellos a abandonar todo lo que tienen”, manifestó Peimbert Calvo.
Durante un recorrido efectuado este fin de semana, por el defensor oaxaqueño de manera conjunta con el titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Chiapas y el quinto visitador de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, en los límites ente Oaxaca y Chiapas, mantuvieron un acercamiento con elementos de la policía federal, para dialogar en torno al paso de la caravana.
Posteriormente instaron a la organización Pueblos sin Fronteras para solicitar que el comité, acompañado por los representantes de la Defensoría y las Comisiones sostuvieran una plática con la el titular de la Policía Federal para que sus elementos se retirasen.
Este lunes los migrantes se encuentran en tránsito en el Istmo de Tehuantepec en diversas poblaciones. En Juchitán, la presidenta municipal Gloria Sánchez, informó que la noche del domingo que llegaron 250 personas, quienes “vienen adelantados”, pero se espera que en los próximos días lleguen miles.
E hizo un llamado para que los pobladores se solidaricen y brinden agua, café, agua, medicamentos, pañales y alimentos no perecederos.