La Cámara Nacional de la Industria Restaurantera (Canirac) en Oaxaca, además de estar dispuesta a dejar de emplear unicel para empaquetar alimentos y bebidas, como lo normó el municipio de la capital, desde hace medio año inició una campaña ecológica para disminuir el uso de plásticos en negocios.
El delegado para el estado de Oaxaca de la Comisión Ejecutiva Nacional de la Canirac, Onésimo Bravo, afirmó que la agrupación en el ámbito federal puso en marcha un programa de capacitación sobre el daño que causa las bolsas y el poliestireno expandido.
De ahí que resaltó, una gran parte de los comercios establecidos dedicados a la venta de alimentos ha sustituido el unicel, por otro tipo de insumos como el cartón, que puede ser reciclado.
Agregó que el sector también ha impulsado estrategias para disminuir el uso de bolsas de plástico, popotes y otros productos contaminantes que tardan muchos años en degradarse.
Ante ello, celebró la determinación del municipio de Oaxaca de Juárez de prohibir el uso de unicel, que entrará en vigor a partir de octubre, como parte de una iniciativa presentada por la regidora de Salud Pública y Vialidad, Leslie Jiménez Valencia el pasado 25 de julio.
La medida consistente en reformar el artículo 16 del “Reglamento para el funcionamiento de establecimientos comerciales en el municipio de Oaxaca de Juárez”, establece la prohibición de utilizar “envases de poliestireno expandido y/o unicel en la venta y entrega de alimentos”.
Onésimo Bravo añadió que sin embargo, las autoridades también deben ampliar el ámbito de la prohibición a otro tipo de establecimientos, ya que el comercio informal hace uso del unicel de forma discriminada.
La norma, opinó, debe involucrar también a los productores y consumidores, así como establecer campañas de concientización y sensibilización que contribuyan a disminuir la demanda de este tipo de productos.
En el ámbito nacional, resaltó, hay restaurantes que ofrecen promociones o descuentos a las personas que llevan recipientes para su café, o para empaquetar sus alimentos, lo que permite desincentivar el uso de plásticos y unicel.
Consideró necesaria una política integral municipal, estatal y federal de cuidado al medio ambiente, y recalcó que los restauranteros han iniciado ya por iniciativa propia, medidas para cambiar el uso productos contaminantes por otros que pueden ser reciclados.
En la entidad, esta Cámara reúne a unos tres mil 500 restauranteros de todo el estado, de los que alrededor de 500 se encuentran en la capital oaxaqueña.