Los recientes tiroteos masivos en Estados Unidos han fortalecido los argumentos a favor de legislaciones más estrictas para la venta de armas. Sin embargo, un grupo de estudios recientes, publicado en Journal of Urban Health, apunta a un problema distinto y quizá, mucho más peligroso: las armas de fuego en el hogar. He aquí algunas de las cifras que presentan los nuevos informes.
63
Porcentaje de adultos estadounidenses que creen que “un arma en casa hace que sea un lugar más seguro”: casi el doble respecto de 2002.
54
Porcentaje de homicidios en que la violencia doméstica o familiar condujo a la muerte de cuatro o más personas.
70
Porcentaje de homicidios de parejas íntimas cometidos con armas de fuego.
Una de cada tres
Cifra de familias estadounidenses con, al menos, un arma de fuego en casa.
251,300
Promedio de armas robadas, anualmente, entre 2010 y 2014. Los robos domiciliarios representan 58 por ciento de estos hurtos, a los cuales contribuyen los propietarios de armas que no las guardan bajo llave.
25
Porcentaje de crímenes por armas de fuego en los que alguien se suicidó después de matar a su pareja íntima.
1,468
Cifra de niños estadounidenses muertos por herida de arma de fuego en 2015. Cuarenta por ciento de estas muertes fue por suicidio o disparo accidental: contra sí mismos u otro menor.
22 mil millones de dólares
Costos médicos y laborales resultantes de los tiroteos, mortales o no, entre 2010 y 2012.
21
Porcentaje de niños estadounidenses que viven en una casa donde hay, al menos, un arma de fuego cargada y que no se encuentra bajo llave. Eso equivale a 4.6 millones de niños: más del doble que en 2002 (en parte, aunque no completamente debido al crecimiento poblacional).
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek