Yuvenil Torres I Pachuca
Aunque el saldo de la duda pública de Hidalgo es menor al del promedio nacional, el gobierno estatal demorará 11.7 años en liquidar sus empréstitos; es decir, en junio de 2029.
Además, la deuda per cápita, que se refiere al monto promedio que debería aportar cada uno de los 2 millones 858 mil 359 hidalguenses para cubrir los adeudos estatales es de 2 mil pesos, de acuerdo con el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP).
Al cuarto trimestre de 2017, las obligaciones financieras de Hidalgo ascendieron a 5 mil 800 millones de pesos; lo que representa 13 por ciento de sus ingresos totales, dice el análisis del organismo.
Según el documento, los pasivos equivalieron a 41 por ciento de las participaciones federales a la entidad durante la anualidad anterior.
En lo que corresponde a la tasa de interés promedio ponderada, el organismo menciona que el indicador permite evaluar el saldo de las obligaciones por entidad federativa.
En el caso de Hidalgo, la suma es apenas superior al promedio nacional. La media de la tasa anual nominal del país es de 8.1 por ciento; mientras, a nivel local es de 8.2 por ciento.
En lo referente a la composición de la deuda hidalguense por tipo de acreditado, el CEFP detalla que 98 por ciento de los pasivos corresponden al gobierno del estado y el resto a los municipios.
Por tipo de acreedor, 56 por ciento de los empréstitos estatales están contratados con la banca múltiple; 36 por ciento con la banca de desarrollo y 9 por ciento “con otros”, dice el informe financiero.
En su análisis, el organismo académico alertó que en 2002 el saldo de la deuda subnacional ascendió a 116 mil 218.4 millones de pesos; no obstante, al finalizar 2017 registró un monto de 580 mil 644.7 millones de pesos, esto representa un incremento en 150.7 por ciento en términos reales.