El avance en investigación sobre desarrollo de vacunas en el mundo se mantiene en constante actualización, y América Latina ha adelantado mucho en la erradicación de enfermedades prevenibles como poliomielitis, sarampión y rubeola; y la buena noticia es que ya se tiene lista la inmunización contra el dengue, que se planea distribuir a finales de 2015.
Durante el período 2000-2013 el dengue se hizo más frecuente en México, particularmente entre habitantes de estados costeros. En ese lapso se reportaron cerca de 700 000 casos en todo el país, con un incremento escalonado año a año, según cifras del INEGI.
Además, aumentó la preocupación por el contagio en niños, ya que al año de edad, un 17 por ciento de los bebés tuvieron contacto con el virus del dengue, y entre los cinco y 14 años, hasta el 70 por ciento de la población de zonas costeras. Por esta razón se puede considerar que el dengue es hoy un serio problema de salud pública en México, ya que casos menos complicados, casos severos, hospitalizaciones y muertes están en franco aumento. El dengue es fatal en alrededor del 5 por ciento de los casos, con mayor mortalidad entre los niños.
Mientras, en el mundo alrededor de 2500 millones de personas —más del 40 por ciento de la población global— están en riesgo de contraerlo. De ahí que una vacuna eficaz es de vital importancia en este momento.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que cada año se producen entre 50 y 100 millones de infecciones por este virus en todo el orbe.
A finales de 2013, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió que América Latina batió su marca histórica de casos de dengue: en la región causó más de 1000 muertes y afectó a más de dos millones de personas.
Otro aspecto importante es el costo del tratamiento promedio por caso; de acuerdo con la tipología, oscila entre 33 y 52.8 dólares para el dengue ambulatorio; entre 235 y 490 dólares el dengue hospitalario; y para el dengue hemorrágico entre 1500 y 5000 dólares.
El doctor José Luis Arredondo, del Instituto Nacional de Pediatría, quien participó en el Noveno Simposio Vaccinology 2014, realizado en la ciudad de México hace unos días, dice a Newsweek en Español: “Todos estamos muy optimistas po el impacto de poder disminuir los casos de dengue. Los resultados demuestran que protege en 60.8 por ciento de riesgo de contagio, reduce un 80 por ciento las posibilidades de que pueda agravarse y ser hospitalizado, y evita hasta un 90 por ciento el dengue hemorrágico. El estudio se realizó en 20 800 sujetos de edades entre nueve y 16 años, participaron Brasil, Colombia, Honduras, México y Puerto Rico”.
Aún es pronto para decir exactamente cuándo podría circular la vacuna, según Arredondo: “Cada país, dependiendo de su incidencia, pedirá el número de vacunas para su población. Pero aún no se sabe exactamente en qué mes ya comenzarán a circular ni cuánto va a costar. Se prevé que sea a mediados del año que entra, esto lleva un proceso de aprobación que generalmente es de entre tres y seis meses”.
Respecto al panorama de distribución gratuita, el doctor Arredondo opina que México “es uno de los países que a escala mundial tiene las mejores coberturas de vacunación, está por arriba del 80 por ciento. Es uno de los países que tienen mayor población cubierta de vacunación, y eso es motivo de orgullo. Estamos orgullosos de poder decir que se ha tenido una importante disminución en enfermedades como sarampión, rubeola, polio, enfermedad del sistema nervioso central con meningitis por neumococo, virus de influenza, virus del papiloma humano… que ya se aplica a niñas desde los nueve años”.
Por su parte, la Dra. Carla Domínguez, coordinadora del Programa Nacional de Inmunización del Ministerio de Salud de Brasil, expuso la importancia e impacto de la vacunación contra la influenza en este país:
“Lo que se está haciendo es una reunión entre países de la región. La influenza es una enfermedad respiratoria contagiosa que en ocasiones puede llevar a la muerte, y la mejor manera de evitar contraerla es a través de la vacunación. La cobertura de la vacuna contra la influenza, en el caso de Brasil, comenzó en 1999 para los adultos mayores de 65 años, y en el transcurso de los siguientes 15 años esta cobertura ha sido ampliada para proteger a un mayor número de personas en riesgo. Es un gran caso de éxito, ya que estos grupos en riesgo incluyen personas con enfermedades crónicas respiratorias, cardiovasculares, hepáticas y renales.”
En este contexto, Carla Vizzoti, directora del Programa Nacional de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles del Ministerio de Salud de Argentina, dice a Newsweek en Español:
“La región es pionera en materia de vacunación, la gran cobertura hace que seamos punta de lanza en calidad. Podemos decir que ya se eliminó la poliomielitis, el sarampión y la rubeola.”
No obstante, la especialista considera que entre países de América Latina hay diferencias: “México y Brasil están en la mejor posición en cuestión de distribución de vacunas en contra de la hemofilus influenza, que es la primera causa de meningitis. También con el neumococo, en dos años se disminuyó el 75 por ciento en niños menores de cinco años en Argentina”.
Sobre el tema de rotavirus en México, el Dr. Ignacio Villaseñor, secretario técnico del Consejo Nacional de Vacunación de la Secretaría de Salud de México, comparte datos sobre la disminución de hospitalizaciones y mortalidad infantil a causa del rotavirus, un virus que provoca vómitos y diarrea, sobre todo en lactantes y niños pequeños.
“En los últimos cinco años, México ha invertido alrededor de 2200 millones de pesos en la adquisición de vacunas para proteger a los niños, y esto ha dado como resultado la reducción de más del 50 por ciento de las hospitalizaciones a causa de rotavirus y una disminución de más del 60 por ciento de la tasa de mortalidad”, indica Villaseñor.
Lo anterior, aunado a otras acciones de salud pública tales como los días nacionales de vacunación, la hidratación oral, los cuidados desde el nacimiento y las semanas nacionales de vacunación, ha permitido disminuir considerablemente el número de casos, hospitalizaciones y muertes por distintos padecimientos.
“En México, la universalización de la vacuna ha evitado más de 180 000 casos de rotavirus, más de 25 000 hospitalizaciones y más de 900 muertes. Esta vacuna es un éxito no solo para América Latina, sino para las demás regiones del mundo”, finalizó.
Por su parte, el Dr. Marco Safadi, jefe del Departamento de Pediatría de la Facultad de Ciencias Médicas de la Escuela de Medicina Santa Casa de São Paulo, aborda el tema de vacunación en Brasil y Chile para la meningitis meningocócica, infección que causa hinchazón e irritación de las membranas que recubren el cerebro y la médula espinal.
“La vacuna para meningococo es particular y distinta a las demás, pues no es posible hacer estudios de eficacia previos, y un importante desafío de la enfermedad es que el 90 por ciento de los casos ocurren en niños sanos, lo que significa que un infante saludable puede presentar un cuadro complicado en muy poco tiempo”, indica.
Tendencias de no vacunación, nocivas para la población
Actualmente hay ciertos grupos de la población que se han mostrado renuentes ante las vacunas, ya que consideran que es más mercadotecnia de las grandes farmacéuticas que la verdadera posibilidad de protección antes las diversas enfermedades, a lo que José Luis Arredondo responde:
“Desgraciadamente hay diversos grupos sociales o tendencias en contra de las vacunas y hacen mucho daño. Yo le puedo decir, con más de 30 años en la práctica médica, que con estas vacunas se ha disminuido un gran número de posibles casos y puede salvarles la vida, y se evitan así muchas tragedias; esto es algo muy delicado.”
El desarrollo de vacunas para ciertas enfermedades tiene sus propias complicaciones, dependiendo de cada una. En el caso del ébola, a raíz del aumento drástico de los recientes contagios entre población de cada vez más países, el doctor José Luis Arredondo expresa que “como es una epidemia centralizada en países africanos, la mayoría de los grupos que invierten en investigación en vacunas no lo vieron como algo que pudiera extenderse, no hubo la planeación debida. Sin embargo, ya con su expansión y apoyo de investigadores de España y otros países, se está trabajando en Suiza para acelerar la vacuna contra esta enfermedad, igual la Organización Mundial de la Salud. La velocidad para encontrar esta vacuna se ha dado porque, a diferencia de la del VIH, la tasa de mortalidad es más del 50 por ciento con el ébola”.
Mientras, en el caso de la vacuna contra el VIH, “es complicado porque es un virus que tiene la capacidad de integrarse a las células humanas y se camufla con el DNA de la persona, y de momento es difícil, aunque ya se lleva estudiando mucho años. La parte benéfica es que se ha disminuido la morbilidad y mortalidad, y se han extendido las medidas preventivas y antivirales que son muy eficaces”, opina el doctor Arredondo.
Por su parte, la doctora Carla Vizzoti señala que “hay nuevas vacunas que se están desarrollando, pero aún no se tiene una inoculación como tal, como con el VIH, malaria o chagas. Además, la distribución por país es diferente en Argentina, la prevención primaria es política de Estado, el Ministerio de Salud está muy al pendiente de esto. Del año 2013 a este se aumentó en 2000 por ciento el presupuesto para adquisición de vacunas, se compraron 10 de las principales vacunas que están disponibles, 13 de las 19 principales enfermedades se han disminuido. Argentina desarrolló además un programa de recepción en tiempo real de la vacunación en la población. Otro caso de éxito es el combate al virus sincitial respiratorio, que es la primera causa de bronquiolitis en niños, por lo que se implementó proteger a las embarazadas vacunándolas y, por consiguiente, a los niños, reduciendo así 90 por ciento de mortalidad. Es una decisión política que el Estado provea a la población de forma gratuita, es símbolo de equidad porque no toda la población puede adquirir en el sector privado estas vacunas”.
La mutación de los diversos virus es otro factor que complica la inmunización entre la población; sin embargo, el doctor Arredondo piensa que en el caso de México “estamos preparados para las nuevas mutaciones para que no nos agarren por sorpresa como con la influenza AH1N1. Se trabaja constantemente en la evolución de los virus, por ejemplo, ya hay vacunas nuevas contra la influenza, que tiene cuatro serotipos, y así van avanzando. Hay laboratorios mundiales que están constantemente investigando las mutaciones de diversas enfermedades y focalizadas por regiones para hacerles frente. En el caso del dengue son cuatro serotipos, en México predomina el serotipo 1 y 2, en Brasil predomina el grupo 4, y así van variando, pero al mismo tiempo se desarrollan y distribuyen conforme a las necesidades de cada país y región”.
