La auxiliar de enfermería española Teresa Romero, que fue la primera infectada con ébola fuera del continente africano, saldrá este miércoles del hospital de Madrid Carlos III, donde ha estado ingresada un mes tras superar la enfermedad y ser dada de alta, anunciaron sus médicos.
“Hoy recibirá el alta Teresa Romero, paciente y profesional de nuestro hospital, lo cual significa una gran noticia después de un mes muy complicado para todos nosotros”, anunció el director gerente del hospital Carlos III, Rafael Pérez-Santamaría, en una rueda de prensa junto al equipo médico que la atendió.
Romero, de 44 años y que ingresó el pasado 6 de octubre, se había contagiado tras atender a un misionero español afectado por esta fiebre hemorrágica, repatriado de Sierra Leona el 22 de septiembre y fallecido el 25. La auxiliar técnica también había tratado a un primer misionero repatriado con ébola de Liberia, que falleció el 12 de agosto.
“No queda rastro de virus en su organismo”, aseguró este miércoles el jefe de la unidad de enfermedades infecciosas, José Ramón Arribas, asegurando que Romero “puede hacer una vida completamente normal”. No obstante, matizó que ha “estado 30 días en el hospital por una infección muy grave” por lo que todavía tardará un tiempo en reponerse totalmente.
El caso de Teresa y la cuarentena a que fueron sometidas una quincena de personas que tuvieron contacto más directo con ella causó una alarma en España, que los médicos han querido desactivar reiterando un mensaje de tranquilidad. “Los pacientes, cuando se recuperan, ya no suponen ningún riesgo de contagio”, aseguró Arribas.
Los médicos admitieron este miércoles que temieron por la vida de Teresa. “Ha habido momentos críticos en los que pensábamos que el resultado no iba a ser el que esperábamos”, confesó la doctora Marta Mora de la unidad de medicina tropical, recordando que es un virus con una alta mortalidad, de más del 60%.
La enfermedad de la auxiliar también provocó una polémica política sobre las supuestamente insuficientes medidas de prevención que pusieron en peligro la vida del personal sanitario en contacto con el virus de Ébola. El juzgado de instrucción 21 de Madrid aceptó abrir una investigación sobre el caso tras una denuncia presentada por 15 médicos de urgencias del hospital universitario de La Paz, del que forma parte el hospital Carlos III donde se infectó la técnica sanitaria.
