LIVE

Los dilemas de la Unión Europea frente a Donald Trump

Publicado el 19 de agosto, 2025
Los dilemas de la Unión Europea frente a Donald Trump
Zelenski, Macron y Trump, durante una reunión con líderes europeos en la Casa Blanca, en Washington, este 18 de agosto. (Andrew Caballero-Reynolds / AFP)
La posición de la UE frente a las decisiones de Trump ha estado marcada por la cautela, el pragmatismo y la búsqueda de autonomía dentro de un marco de creciente incertidumbre.

LA PRESIDENCIA DE DONALD TRUMP, ya desde su primer mandato y más aún en este, ha representado cambios significativos en las relaciones internacionales y en la propia política exterior de Estados Unidos. Sus decisiones están impactando de forma directa a un gran número de países, que incluyen desde sus más cercanos socios como Canadá y México, hasta aliados históricos como la Unión Europea (UE).

Temas como su agresiva política arancelaria y las imposiciones en materia de gasto militar, así como las decisiones en torno al conflicto israelí-palestino y la guerra en Ucrania, son ejes clave del accionar de Donald Trump y que de manera particular están incidiendo en la postura de la UE tanto en sus respuestas institucionales como en las reacciones de los Estados miembros.

En materia comercial, Trump ha mantenido una política agresiva hacia un gran número de países, incluida la Unión Europea, haciendo de los aranceles su principal instrumento de presión. En lo que va de 2025, Trump ha anunciado un arancel universal del 10 por ciento sobre todas las importaciones y amenazas específicas del 30 por ciento a los bienes europeos, así como cuotas adicionales al acero, el aluminio y los automóviles.

¿QUÉ HAY DESPUÉS DE UNA NEGOCIACIÓN FRACASADA?

Ante estas acciones, la Unión Europea, preocupada por una posible guerra comercial y sus efectos en la inflación y la estabilidad, buscó primero la negociación, pero finalmente anunció medidas de represalia por fases, dirigidas especialmente a los productos estadounidenses. Los líderes europeos expresaron su inquietud por el unilateralismo de Trump y plantearon la posibilidad de aplicar aranceles sobre servicios digitales, donde Estados Unidos es más competitivo.

Uno de los puntos más conflictivos en la agenda transatlántica es la constante presión de Trump para que los países europeos aumenten significativamente su gasto en defensa. El presidente estadounidense ha sugerido, e incluso en ocasiones exigido, que los miembros de la OTAN dediquen el 5 por ciento de su PIB a defensa, lo que dista mucho del objetivo anterior del 2 por ciento. Ello ha generado mayores tensiones especialmente con países como España, cuyo gobierno considera irrazonable ese nivel de gasto.

No obstante, ante la insistencia estadounidense, la OTAN y algunos aliados europeos como el Reino Unido aumentaron su presupuesto militar, aunque la mayoría de los países miembros siguen mostrando reticencias y buscan soluciones pragmáticas para mantener la cohesión interna de la Alianza, particularmente en un momento de gran tensión por la guerra en Ucrania.

Sin embargo, la UE muestra preocupación por el impacto de estas exigencias en sus propias economías y en la autonomía estratégica europea. No obstante, la presión de Trump parece ganar terreno y paulatinamente la alianza atlántica vira hacia un rearmamento cada vez más significativo.

EL CONFLICTO EN ORIENTE MEDIO ES OTRO PUNTO DE QUIEBRE

Otro tema de tensión entre la Unión Europea y Washington es el relacionado con las posiciones de ambos respecto al conflicto en Oriente Medio y el papel de Israel. La política de Trump ha sido claramente proisraelí, con decisiones como el reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel y, más recientemente, propuestas drásticas relativas a la Franja de Gaza, como la posible expulsión de la población palestina.

Estas acciones han sido condenadas por la comunidad internacional, incluida la ONU. Sin embargo, la respuesta de la Unión Europea ha sido, en general, cautelosa y marcada por la búsqueda de consensos internos. Institucionalmente, la UE ha reiterado su compromiso con la solución de los dos Estados y el respeto al derecho internacional. Sin embargo, la respuesta ha sido percibida como tibia, pues contrasta con la contundencia de algunos de sus Estados miembros, como Alemania y España, que han calificado de inaceptables las propuestas de Trump sobre Gaza.

Esta prudencia institucional se explica en parte por las divergencias internas entre los países de la UE y su posición notoriamente más débil en el nuevo equilibrio global trasatlántico, lo que se agudiza por las propias tensiones respecto a la guerra en Ucrania.

El enfoque estadounidense hacia la guerra en Ucrania bajo Trump ha sufrido notables cambios y virajes inesperados. Inicialmente mostró escepticismo respecto al apoyo militar a Kiev, pero, ante la escalada del conflicto y el endurecimiento de Europa frente a Rusia, Trump ha ajustado su política y reanudado el envío de sistemas antiaéreos Patriot a Ucrania, aunque condicionando la financiación de esto a la Unión Europea.

¿CONSECUENCIAS POR APOYAR A UCRANIA?

Ello no ha sido muy bien visto por sectores importantes al interior de los países, así la UE ha debido recalibrar su política en respuesta a este cambio, reafirmando su apoyo a Ucrania y aumentando su participación en la asistencia militar y financiera, lo cual está teniendo importantes costos políticos al interior de los Estados miembros, lo que cada vez más se refleja en las urnas.

Es claro que la posición de la Unión Europea frente a las decisiones de Donald Trump ha estado marcada por la cautela, el pragmatismo y la búsqueda de autonomía dentro de un marco de creciente incertidumbre y de reacomodos hegemónicos globales. Si bien la UE ha respondido con firmeza en temas comerciales y ha incrementado su gasto militar debido a la presión estadounidense, su respuesta ante la cuestión palestina ha sido más tibia y limitada por divisiones internas. Ello y su decidido apoyo a Ucrania en su guerra con Rusia agudiza las tensiones transatlánticas derivadas de la imprevisibilidad y el unilateralismo de Trump. N

—∞—

Luz Araceli González Uresti es profesora investigadora de Relaciones Internacionales de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tec de Monterrey. Los puntos de vista expresados en este artículo son responsabilidad de la autora.

NW Noticias te recomienda también estos artículos de opinión:

Compartir en:
Síguenos
© 2025 Newsweek en Español
Los dilemas de la Unión Europea frente a Donald Trump