Atlixco, Pue. Las luces de Atlixco no solo encendieron la noche del viernes: encendieron también el pulso turístico de Puebla. En apenas tres días, más de 90 mil personas recorrieron la Villa Iluminada 2025, una cifra que superó todas las previsiones y confirmó, una vez más, la capacidad de este Pueblo Mágico para convertirse en epicentro nacional de fin de año.
La presidenta municipal, Ariadna Ayala, informó que el arranque del festival rebasó las expectativas de afluencia, al registrar una marea constante de familias, turistas nacionales y visitantes extranjeros desde la noche inaugural. El encendido oficial dio paso a un fin de semana de calles abarrotadas, hoteles con alta ocupación y una economía local activada a plenitud.
El circuito luminoso, acompañado por el ya emblemático Valle de Catrinas, volvió a funcionar como la columna vertebral del turismo atlixquense. Durante viernes, sábado y domingo, miles de personas caminaron entre figuras monumentales, arcos de luz, música en vivo y puestos de artesanías y antojitos típicos, en un entorno que combina tradición, espectáculo y economía creativa.
Ayala recordó que para esta edición se proyecta la llegada de alrededor de 1.2 millones de visitantes a lo largo de toda la temporada, una meta que, a juzgar por el ritmo de los primeros días, podría superarse con facilidad. El dato cobra mayor relevancia si se considera que aún no inicia el periodo vacacional de diciembre, cuando tradicionalmente se registra el mayor flujo de turistas.
Los 90 mil asistentes contabilizados corresponden únicamente al primer fin de semana, lo que perfila a la Villa Iluminada 2025 como una de las ediciones con mayor afluencia desde su creación. En términos turísticos y económicos, el impacto se anticipa significativo para sectores como el comercio, los servicios, la hotelería y la gastronomía.
La Villa Iluminada nació en 2011 como un proyecto local de recuperación de espacios públicos y promoción turística. Hoy, más de una década después, es uno de los productos más consolidados de Atlixco. Para 2025, el recorrido incluye zonas temáticas inspiradas en el cuento de Pinocho y un retorno simbólico hacia la colonia Revolución, ubicada a siete minutos de la cabecera municipal, donde el proyecto tuvo su origen.
Más allá del espectáculo de luces, el evento representa un caso de estudio sobre cómo el turismo cultural y de entretenimiento puede detonar desarrollo económico regional cuando se articula con identidad, planeación y participación comunitaria. Atlixco nuevamente se coloca bajo los reflectores. Y esta vez, con cifras que hablan por sí solas.
