Durango inició el Mes Rosa con la Caminata de la Esperanza, que reunió a más de 7 mil personas en el Corredor Constitución. Familias, sobrevivientes y sociedad civil caminaron unidas, de la mano del gobernador Esteban Villegas Villarreal y la presidenta del DIF Estatal, Marisol Rosso Rivera. El momento más emotivo fue el encendido de la Luz de la Esperanza, que iluminó el cielo como símbolo de fe y fortaleza en la lucha contra el cáncer de mama. Con esta muestra de unión comienza un mes dedicado a crear conciencia, acompañar a las mujeres y recordar que ninguna batalla se libra sola.
“Hace 13 años nació la idea de sembrar conciencia en cada rincón de Durango con los Cafés Rosa, con caminatas y encuentros que llegaran hasta la casa más lejana, con un mensaje muy claro: el cáncer de mama es curable si lo detectamos a tiempo. Hoy reafirmamos este compromiso, porque salvar la vida de una mujer es salvar la vida de toda una familia. Agradezco a Marisol por nunca soltar este sueño, y a todas las mujeres que con valentía nos demuestran que son verdaderas gigantes”, expresó el gobernador Esteban Villegas Villarreal.
Al recibir de manos de las sobrevivientes la Luz de la Esperanza, la presidenta del DIF Estatal, Marisol Rosso Rivera, recordó los inicios de este movimiento: “Este mes es profundamente significativo para mí y para Durango. Aquí estamos unidos, con una misma fe y una misma esperanza, para honrar a nuestras mujeres duranguenses. Gracias a todas las guerreras que hoy nos inspiran, porque su fortaleza ha hecho que valiera la pena cada café, cada caminata, cada esfuerzo. Hoy, más que nunca, reafirmamos que ninguna mujer debe caminar sola en esta lucha, y durante octubre recorreremos los municipios con la Ruta de la Salud, jornadas de detección y caminatas que llevarán esperanza a cada rincón”.
La sobreviviente Natieli Cuéllar Deras, en representación de muchas mujeres que enfrentan y han enfrentado esta enfermedad, compartió un mensaje cargado de emotividad: “Esta vela simboliza la esperanza encendida, la fuerza de quienes seguimos luchando y de quienes partieron, pero nos dejaron como herencia el valor de no rendirse. Gracias por caminar con nosotras, por creer y apoyar, porque mientras haya manos unidas ninguna mujer estará sola”.
El presidente municipal de Durango, Toño Ochoa, se sumó al mensaje de unión: “La vida siempre es lo más valioso y hoy Durango lo confirma con unidad. Gracias a Esteban y Marisol por recordarnos que juntos somos una gran familia y que, unidos, podemos vencer cualquier adversidad”.
Con una cuenta regresiva, la Luz de la Esperanza se elevó e iluminó el cielo duranguense, marcando el inicio de un mes en el que se realizarán caminatas, jornadas de detección oportuna y actividades en los 39 municipios, sembrando conciencia y acompañando a las mujeres en la lucha contra el cáncer de mama.
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