Estados Unidos enfrenta duras críticas por la decisión de acoger a refugiados ucranianos luego de repatriar a miles de inmigrantes haitianos. Sobre todo durante los últimos meses, docenas de miles de personas originarias de Haití han sido rechazadas en tierras estadounidenses.
Este jueves, un importante funcionario de la presidencia de Biden anunció a la prensa que, gracias al programa para refugiados y otras vías legales, Estados Unidos recibirá hasta 100,000 ucranianos y otros afectados que huyen de la invasión rusa.
Desde que iniciaron las hostilidades de Rusia contra Ucrania, a fines de febrero pasado, más de 3 millones de ucranianos han abandonado su patria.
“Al abrir nuestras fronteras a estas personas aliviamos la presión en los países de acogida que están dando la cara a la mayor crisis de refugiados que Europa haya visto desde la Segunda Guerra Mundial”, explicó el funcionario.
Sin embargo, muchos cuestionan la postura estadounidense de apoyar a los ucranianos habiendo deportado a miles de haitianos. El año pasado, docenas de miles de haitianos huyeron de un país en crisis por el asesinato del presidente Jovenel Moïse y un terremoto de magnitud 7.2.
La indignación pública estalló en septiembre de 2021, cuando imágenes virales mostraron a jinetes de la patrulla fronterizaacorralando a los migrantes.
En su comentario sobre el reciente anuncio de la Casa Blanca, el columnista Charles Bow, de The New York Times, escribió en Twitter: “Me parece muy bueno. Aunque también resalta lo mal que trataron y siguen tratando a los inmigrantes haitianos. ¡No han cesado las deportaciones!”.
This is good, but also underscores just how badly Haitian migrants were treated and are STILL being treated. They’re still being deported!
…….
US to welcome 100,000 Ukrainian refugeeshttps://t.co/vwn8MlmARJ
— Charles M. Blow (@CharlesMBlow) March 24, 2022
“UNA POLÍTICA ATROZ”
Por su parte, el congresista Andy Levin (demócrata por Michigan) tuiteó: “Estados Unidos no puede proclamarse refugio seguro para los oprimidos y perseguidos del mundo cuando rechaza refugiados por su país de origen”.
“Usar el Título 42 para justificar la deportación de refugiados haitianos —y demás inmigrantes negros y latinos— es una política atroz que [Biden] debe abolir”, concluyó Levin.
The U.S. can't claim to be a global safe haven for the oppressed & persecuted if we turn away refugees seeking safety because of where they're from. Deporting Haitian refugees—and other Black + Brown immigrants—and upholding Title 42 is an appalling policy that @POTUS must stop.
— Rep. Andy Levin (@RepAndyLevin) March 24, 2022
El Título 42 ordena la expulsión de quienes ingresen en Estados Unidos procedentes de países donde haya enfermedades contagiosas. La presidencia de Trump adoptó esta medida en marzo de 2020 con la finalidad de expulsar migrantes en plena pandemia de covid-19.
Su política condujo a que miles de refugiados centroamericanos y haitianos fueran rechazados en la frontera con México.
Esta semana, Human Rights Watch publicó un informe que detalla el “caos” al que regresan los refugiados haitianos repatriados. El grupo reveló que, entre el 1 de enero de 2021 y el 26 de febrero de 2022, Haití recibió 25,765 ciudadanos repatriados. De ellos, 20,309 (79 por ciento) fueron deportados de Estados Unidos.
LAS FAMOSAS EXCEPCIONES INDIVIDUALES
La semana pasada, el secretario del Departamento de Seguridad Nacional estadounidense, Alejandro Mayorkas, declaró a la prensa que no se aplicaría el Título 42 a los refugiados ucranianos y demás migrantes que demuestren “temor creíble”.
El secretario agregó que su Departamento hará excepciones individuales conforme los funcionarios de la dependencia “determinen la validez del reclamo de ayuda humanitaria”.
En respuesta, Human Rights Watch afirmó que Estados Unidos “[ha violado] el derecho internacional al impedir que los haitianos deportados bajo el Título 42 manifiesten sus temores de persecución o violencia, o soliciten asilo”.
Para este año fiscal, el presidente Biden ha fijado un límite de 125,000 refugiados procedentes de todos los países. Al respecto, la congresista Sarah Jacobs (demócrata por California) exigió que la Casa Blanca no solo revoque el Título 42. Pidió que también elimine la cuota límite de refugiados.
Welcoming 100,000 refugees from Ukraine & providing $1 billion in humanitarian aid is the right thing to do. Grateful that @POTUS heard our calls. Now we must lift our refugee cap – currently just 125,000 total – end Title 42, and provide relief for all people fleeing conflict.
— Congresswoman Sara Jacobs (@RepSaraJacobs) March 24, 2022
Algo semejante hizo Sawyer Hackett, coanfitrión del podcast Our America (con Julián Castro, excandidato presidencial y funcionario de Obama), al criticar la postura de la presidencia en lo referente al Título 42.
It’s absolutely ridiculous that the Biden admin is letting white Ukrainian families bypass Title 42 while Hispanic families and children fleeing violence and persecution have been blocked from even making a claim for two years.
How can they justify that?
— Sawyer Hackett (@SawyerHackett) March 24, 2022
PROTEGER A QUIENES PIDEN REFUGIO
Newsweek envió peticiones de comentarios tanto a la Casa Blanca como al Departamento de Seguridad Nacional, mas no obtuvo respuesta al momento de esta publicación.
En un comunicado dirigido a Newsweek, Refugees International celebró la decisión estadounidense de acoger hasta 100,000 ucranianos. No obstante, el grupo también abogó por los migrantes que solicitan refugio en la frontera sur con México.
“Consideramos necesario proteger a quienes piden refugio en la frontera sur de Estados Unidos. La repatriación de haitianos es inconcebible. Sobre todo ahora, dadas la violencia, la inestabilidad política y la crisis humanitaria de ese país”, escribió Yael Schacher, subdirectora de Refugee International para las Américas y Europa.
“La respuesta europea a los ucranianos demuestra que Estados Unidos puede hacer mucho más para recibir a quienes buscan la seguridad de sus fronteras. No debemos contraponer a los refugiados de otros países con quienes buscan asilo en la frontera sur, táctica con que la presidencia anterior desató una crisis. Nuestro objetivo debe ser lo opuesto: brindar a otros grupos la misma protección que ofrecemos a los ucranianos”. N
(Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek)