LAS RIVALES Corea del Norte y Corea del Sur han redoblado sus pruebas de misiles balísticos lanzados desde submarinos, con lo que se han convertido en las dos más nuevas potencias mundiales que se unen al pequeño club de naciones que poseen tales capacidades.
Corea del Norte llevó a cabo una prueba el lunes, o el martes temprano en su hora local, de lo que Japón y Corea del Sur, aliados de Estados Unidos, identificaron como un misil balístico lanzado desde un submarino (MBLS), disparado en las cercanías de Sinpo, en la costa este. Se dijo que el proyectil alcanzó una altitud próxima a los 50 a 60 kilómetros y acuatizó a alrededor de 590 a 600 kilómetros de distancia en el mar.
Al día siguiente, el Rodong Sinmun, periódico oficial del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Corea, publicó cinco imágenes, las cuales mostraban lo que parecían ser fotos del “nuevo tipo de misil balístico lanzado desde un submarino”. Esta sería la primera vez que el país da evidencia de que podía llevar a cabo dicha prueba desde un submarino real con un misil balístico.
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El lanzamiento fue el primero que ha llevado a cabo Corea del Norte en casi exactamente dos años, después de una prueba en octubre de 2019 en la que se disparó el Pukguksong-3 desde una plataforma submarina. Un arma identificada como el Pukguksong-4 fue exhibida durante un desfile militar en Pionyang un año después, en octubre pasado, mientras que otro MBLS fue mostrado durante un mitin en enero. Pero otro MBLS potencial apareció junto con una serie de armas en la exhibición Autodefensa 2021 de la semana pasada en la capital.
Corea del Norte ha llevado a cabo con anterioridad lanzamientos de MBLS por lo menos desde mayo de 2015 a agosto de 2016, usando el Pukkuksong-1, y el Rodong Sinmun reportó que el submarino usado se llamaba “8.24 Yongung”, desde el cual “se lanzó exitosamente el primer misil balístico estratégico expulsado desde un submarino hace cinco años para demostrar el poderío militar de la RPDC”, las siglas del nombre oficial de Corea del Norte, República Popular Democrática de Corea.
El reporte le dio crédito a la Academia de Ciencias de Defensa y dijo que el evento fue supervisado por altos funcionarios de la institución, junto con Yu Jin, director de departamento del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Corea, y Kim Jong Sik, subdirector de departamento de la Industria de Municiones del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Corea.
La academia también “aclaró que el tipo nuevo de MBLS, en el cual se introdujeron muchas tecnologías avanzadas de control de dirección incluida la movilidad de flanco y la movilidad de salto al planear, contribuirán grandemente a colocar la tecnología de defensa del país en un nivel alto y a mejorar la capacidad operativa submarina de nuestra armada”.
Por años, Corea del Norte fue la potencia mundial más reciente de MBLS, uniéndose a Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, China e India. Pero el mes pasado Corea del Sur entró en el grupo, llevando a cabo su propia prueba de MBLS y convirtiéndola en el único país sin armas nucleares que lo ha hecho.
El Ministerio de Defensa de Corea del Sur dijo que el MBLS fue lanzado desde el submarino ROKS Dosan Ahn Changho. La prueba fue observada por el presidente Moon Jae-in, quien, tras expresar un entusiasmo sin precedentes de reavivar las acciones de paz detenidas entre las Coreas, también señaló la necesidad de defender al país de un ataque potencial.
“Aumentar nuestras capacidades de misiles puede crear una disuasión definitiva contra las provocaciones norcoreanas gracias a este exitoso lanzamiento de prueba del misil”.
En medio de las tensiones más recientes que han afectado a la península coreana, Sung Kim, representante especial de Estados Unidos ante Corea del Norte, viajó desde Seúl a Washington para reunirse con Funakoshi Takehiro, director general de la Oficina de Relaciones con Asia y Oceanía del Ministerio de Relaciones Exteriores de Japón, y Noh Kyu-duk, representante especial de la República de Corea para la Paz y Asuntos de Seguridad en la Península Coreana.
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Los tres “celebraron discusiones detalladas sobre la situación actual en la península coreana y reafirmaron su compromiso con trabajar de manera trilateral para reducir las tensiones y avanzar hacia la meta compartida de desnuclearizar a la península coreana”, según el Departamento de Estado.
El enviado estadounidense atacó en repetidas ocasiones la prueba reciente del MBLS de Corea del Norte y enfatizó el llamado del presidente Joe Biden a un diálogo con Corea del Norte, así como el compromiso de la administración con sus dos aliados en la región Asia-Pacífico.
“El representante especial Kim enfatizó la condena de Estados Unidos al lanzamiento del misil balístico por parte de la RPDC el 19 de octubre, el cual viola múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, y pidió que la RPDC se abstenga de más provocaciones y participe en un diálogo sostenido y sustancial”, rezaba el comunicado.
“Él reiteró aún más el compromiso férreo de Washington con sus aliados, la República de Corea y Japón. El representante especial Kim expresó su apoyo a la ayuda humanitaria a los norcoreanos más vulnerables y afirmó el compromiso de Estados Unidos con la resolución inmediata del problema de los secuestros”. N
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek
