LA POLICÍA desmanteló un criadero ilegal de perros, donde fueron localizados casi un centenar de animales de raza destinados a la venta y cuyo valor total en el mercado supera los 83,000 dólares.
La mayoría de los animales, hallados en un secadero de tabaco a la salida de Belicena, en Vegas del Genil (Granada), en España, estaban sin vacunar, y a 34 de ellos les habían cortado las cuerdas vocales para que no delataran su ubicación.
La Guardia Civil detuvo al responsable del criadero, de 44 años, como presunto autor de delitos relacionados con la protección de la flora y la fauna por maltrato animal y intrusismo profesional al descubrir que había ejercido de veterinario sin serlo.
También lee: Cómo los perros pueden detectar síntomas de COVID-19 cinco días antes de que empiecen
Tras prestar declaración, quedó en libertad con cargos.
Los agentes encontraron casi un centenar de perros de las razas bichón maltés, pomerania, caniche y chihuahua destinados a la venta, la mayoría sin el microchip reglamentario.
Fueron precisamente los ladridos de algunos de estos perros que provenían del secadero los que despertaron las alarmas del Grupo de Voluntarios de Protección Animal del municipio, que puso estos hechos en conocimiento del Ayuntamiento.
Desde entonces, la Policía Local de Vegas del Genil y el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil dieron seguimiento del caso hasta que hace unos días, tras contactar con su propietario, entraron en su interior.
No te pierdas: Vacas matan a un profesor que paseaba a sus perros
“Allí encontraron un total de 98 perros de raza, cuyo valor en el mercado superaría los 70,000 euros, con algunas de las hembras hacinadas en conejeras de menos de un metro cuadrado”, explicó el concejal de Protección Animal, Urbanismo y Medio Ambiente, Alejandro Martín Romero.
El veterinario David López Jaramillo fue el encargado de certificar que casi la mitad de los perros tenían las cuerdas vocales cortadas y que algunas de las hembras habían parido en multitud de ocasiones.
El informe solicitado al Colegio de Veterinarios de Granada expone que la cordectomía, la intervención quirúrgica mediante la que se extirpa las cuerdas vocales a los perros, “es una práctica quirúrgica que requiere anestesia general, conocimientos exhaustivos de anatomía, cirugía y farmacología, y que, si no es llevada a cabo por un veterinario y con un fin terapéutico, se trataría de una práctica de intrusismo profesional y de maltrato animal”. N