En estos momentos los incendios se están propagando a lo largo de grandes extensiones de la selva amazónica en Brasil, en medio de la protesta internacional por la inacción por parte de la administración del presidente Jair Bolsonaro.
Brasil ha experimentado un número récord de incendios forestales este año, más de la mitad de éstos ocurrieron en la región amazónica. Eso es de acuerdo con los datos recopilados por el Instituto Nacional de Investigación Espacial de Brasil (INPE, por sus siglas en portugués).
Las cifras muestran un aumento del 83% en comparación con el mismo período en 2018, lo que representa el mayor número de incendios desde que la agencia comenzó a recopilar dichos datos en 2013, informó Reuters.
De hecho, INPE dice que ha identificado más de 72,000 incendios en Brasil entre enero y agosto de este año, poco más de los 40,000 registrados en todo 2018. Muchos de los incendios recientes en la región amazónica se han centrado en los estados brasileños de Rondônia, Pará, Amazonas y Mato Grosso, que registraron un aumento del 39% con respecto a 2018 a partir del 2 de agosto.
Entonces, ¿qué está causando exactamente estos incendios?
Según la NASA, la selva amazónica ha sido relativamente resistente al fuego a lo largo de su historia debido a sus condiciones húmedas y lluviosas. Pero un aumento en la frecuencia e intensidad de las sequías –un fenómeno que ha sido relacionado con el cambio climático antropogénico–, en combinación con las actividades humanas en el bosque, ha llevado a un aumento en la cantidad de incendios.
Si bien los incendios forestales naturales a veces ocurren en el Amazonas durante la estación seca –que se extiende aproximadamente entre agosto y noviembre–, estos tienden a ser relativamente bajos en frecuencia e intensidad, con llamas que solo alcanzan unos centímetros de altura, informó Mongabay.
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Sin embargo, los expertos advierten que el aumento reciente de los incendios forestales es probablemente el resultado de actividades humanas.
“Esta es, sin ninguna duda, una de las dos únicas veces que ha habido incendios como este [en la Amazonía]”, dijo el ecologista Thomas Lovejoy a National Geographic. “No hay duda de que es consecuencia del reciente aumento de la deforestación”.
Los datos publicados recientemente por el INPE han demostrado que las tasas de deforestación de la Amazonía han aumentado hasta el punto de que cada minuto se pierden alrededor de tres campos de fútbol de árboles, informó The Guardian. De hecho, las cifras muestran que en julio de este año, la deforestación había aumentado en casi un 300 por ciento en comparación con el mismo mes de 2018.
A diferencia de años anteriores en los que los incendios forestales en el Amazonas se han relacionado con precipitaciones inusualmente bajas, los expertos dicen que las condiciones de este año han sido relativamente húmedas.
“No hay nada anormal sobre el clima este año o con la lluvia en la región amazónica, que está un poco por debajo del promedio”, dijo a Reuters Alberto Setzer del INPE.
“La estación seca crea las condiciones favorables para el uso y la propagación del fuego, pero iniciar un incendio es obra de los humanos, ya sea deliberadamente o por accidente”.
Usualmente en la Amazonía el fuego se usa como una técnica para limpiar la tierra para ranchos ganaderos, plantaciones de soja u otros usos, aunque la práctica no siempre es legal.
Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek