Decenas de miles de personas se manifestaron este sábado en el centro de Berlín para protestar contra el odio y el racismo, después de las recientes muestras de xenofobia en el este de Alemania que conmocionaron al país.
Al menos 150.000 manifestantes participaron en la marcha, anunció el colectivo #unteilbar (indivisible), que había anunciado que esperaba la asistencia de 40.000 participantes.
“Se trata ya de un éxito”, celebró su portavoz, Theresa Hartmann.
La policía de Berlín no dio por su parte cifras oficiales.
“¡Decidlo fuerte, decidlo claramente, todos somos indivisibles!”, corearon los participantes que desfilaron bajo un radiante sol y temperaturas estivales en el centro de la capital, antes de llegar a la famosa Puerta de Brandeburgo.
“No hay lugar para los nazis”, “el rescate en el mar no es un crimen”, “más amor, menos odio”, se podía leer en las pancartas.
El colectivo #unteilbar, formado por varias oenegés, artistas o particulares, ya reunió, una semana antes, a miles de personas en las calles de Hamburgo y Múnich.
También estuvieron presentes sindicatos y organizaciones religiosas, caritativas, o representantes políticos de izquierda.
Bajo el eslogan “¡Por una sociedad libre y abierta; contra la exclusión, solidaridad!”, los manifestantes protestaron en particular contra el racismo dirigido por la extrema derecha, que llegó hace un año a la cámara de diputados.
El partido antiinmigración Alternativa para Alemania (AfD) construyó su éxito alimentando el miedo de los alemanes tras la llegada de un millón de refugiados entre 2015 y 2016 al país.
A finales de agosto, una manifestación de simpatizantes de la extrema derecha acabó convirtiéndose en una “caza” al extranjero en las calles de la ciudad de Chemnitz (este).
(Con información de AFP).