Tijuana, B.C.- En los últimos siete años, desde 2017 al 2024, en Baja California se han registrado 48 casos de crímenes de odio que no se han resuelto y en las carpetas de investigación no hay avances. Esta incidencia muestra la vulnerabilidad que todavía viven quienes son parte de la comunidad LGBTTTIQ+.
En el marco del Día contra la HomoLesboTransfobia, el director operativo de Comunidad Cultural de Tijuana LGBTI (Cocut), César Espinoza, compartió que la discriminación que se vive se da en todos los sectores, desde el educativo, sector salud y el área laboral.
“Seguimos viendo discursos homofóbicos, lesbofóbicos, transfóbicos, sigue habiendo mucho eso. Como asociación este año hemos recibido más mensajes de odio en nuestras redes sociales en comparación de años anteriores. Incluso los crímenes de odio, a partir del 2020, se han alzado en nuestra región, entonces sí está desalentador el panorama”, refirió Espinoza.
Explicó que los crímenes de odio, de los que tienen registro, se caracterizan por ser a causa de la identidad, orientación o expresión de género de las víctimas. Entre los casos que se han dado hay desapariciones forzadas como el caso de Tere y Nora, quienes desaparecieron en la colonia Castillo, atentados contra comercios de personas que son parte de la comunidad, así como el asesinato de Yanin Huerta, activista trans.
La discriminación en contra de las personas que son parte de la diversidad sexual, además de la que se da de manera verbal al llamar a una persona con frases peyorativas, también se da al no brindar empleos dignos, como ocurre con las mujeres y hombres trans que no pueden acceder a empleos por la manera en que se visten. De igual manera, esta fobia se expresa a través de la burla en contra de personas no binarias y de quienes utilizan lenguaje incluyente.
Mujeres de la diversidad sexual y personas trans son las principales víctimas de discriminación, ya que los hombres gays y bisexuales se ven menos afectados. Destacó que de los 48 crimenes de odio, 37 son en contra de mujeres lesbianas, bisexuales o transgénero.
En cuanto a los sectores donde se registran más casos de discriminación en contra de la comunidad es el sector educativo, donde más allá de la comunidad estudiantil, son los docentes y personal administrativo.
En el sector salud las mujeres trans no se les permite que se hagan exámenes de próstata y a los hombres trans se les niega el examen papanicolau; misma situación viven mujeres lesbianas a quienes el personal del sector salud les dicen que no pueden realizarles exámenes porque sus parejas sexuales no son hombres.
Espinoza destacó que el acceso a la justicia no es simple para las víctimas, ya que en el caso de las mujeres trans, quienes continúan siendo levantadas por la Policía Municipal, tienen amenazas en su contra si acuden a interponer una denuncia.
Asimismo, señaló que en estos momentos que hay contienda electoral, los candidatos no se han acercado para conocer las necesidades que existen en la comunidad como es la garantía de empleo, educación y salud. Indicó que esto también podría tomarse como una manera de violencia y exclusión. N