Durante un recorrido de prevención en el fraccionamiento Río Dorado, agentes de la policía estatal notaron la presencia anormal de los niños en el área de juegos, desorientados y asustados. La niña de 6 años presentaba golpes en el rostro y manchas de sangre. Tras ser interrogados, los niños señalaron su domicilio, donde los padres estaban drogados, pues al salir, mostraban signos de intoxicación.
La madre y el padrastro fueron detenidos y puestos a disposición de la Fiscalía General del Estado por presunta omisión de cuidados y violencia familiar. La niña, con indicios de haber caído por unas escaleras y su hermano, fueron atendidos por el Programa Esmeralda de la Secretaría de Seguridad Pública debido a su posible intoxicación y lesiones.
El Grupo Esmeralda reportó el caso a la Procuraduría, que constató las condiciones no óptimas de los menores de 6 y 7 años, trasladándolos al Hospital Materno Infantil debido a los daños que presentaban. Una cuidadora designada por la Procuraduría se encuentra en el hospital para atender cualquier necesidad de los niños, incluida la autorización de análisis o estudios más profundos.
La Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, a cargo de Laura Cecilia Rodríguez Franco, está en la fase de investigación para determinar si los abuelos pueden asumir la custodia de los niños, evitando su ingreso a casa hogar.
Dentro de la investigación, se están realizando valoraciones psicológicas y de trabajo social a los abuelos, tanto maternos como paternos, para evaluar si representan redes seguras para los menores.
Rodríguez Franco informó que también ha localizado a otros dos hermanitos en situación de riesgo, buscando una medida de protección que permita que los cuatro infantes queden bajo su cuidado.
Según la procuradora, los menores se encuentran estables y bajo tratamiento.
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