DE TIEMPO Y CIRCUNSTANCIAS
Estoy en España, en la Universidad de Alicante, en Valencia. He venido para asistir a la inauguración de la exposición de dibujos de Junco. Junco es un dibujante de excelencia conocido y respetado por nuestros caricaturistas, pero creo necesario presentárselo a nuestros lectores.
Su nombre es Manuel Álvarez Junco y es el segundo de los cuatro hijos de un connotado abogado español, todos talentosos. Manolo, desde joven, se quiso dedicar al arte, pero la tradición familiar lo llevó por el camino del derecho.
Cursó la carrera de abogado en la Universidad Complutense de Madrid, pero desde que cursaba el bachillerato asistía a la academia de dibujo. Ya como abogado se matriculó en la “School of Art Institute” de Chicago.
Su trabajo en Estados Unidos sobresalió, y fue contratado por una prestigiada revista, Saturday Review, de Nueva York, para hacer ilustraciones. Sin embargo, aunque se había colocado profesionalmente en una de las mejores revistas de Norteamérica, Junco extrañaba a España.
Regresó en 1975 precedido por su prestigio. Cuando llegó de inmediato fue contratado por la revista Triunfo para cubrir las ilustraciones. Triunfo, por aquel entonces, era una de las publicaciones más importantes de España.
TRAZOS DE ÉXITO
Junco, así, publicaba en el Saturday Review y en Triunfo; luego se sumaron a su cartera el periódico El País, Interviú y A las Barricadas, entre otras. En una vuelta de tuerca del destino, Álvarez Junco regresó a su alma mater, la Universidad Complutense, esta vez como profesor adjunto. Ahí, además de dar clases, continuó sus estudios. Al paso del tiempo se convirtió en doctor en Bellas Artes.
En la administración universitaria fue ocupando diferentes puestos: director de Relaciones Internacionales, director del Departamento de Bellas Artes, director de los prestigiados cursos de El Escorial y, así, hasta llegar a vicerrector de Cultura. Otra Universidad, la de Alcalá de Henares, lo ha nombrado profesor honorífico del humor.
Si bien Junco dibujaba para lo más granado de las publicaciones de Europa y el mundo, su desempeño como maestro y vicerrector, en la Complutense de Madrid, le permitió una libertad creativa extraordinaria. Lo que surgió de esta libertad fue una obra muy acabada.
Su trabajo lo ha llevado a recibir varios premios internacionales, entre ellos, el del concurso “Aydin Dogan International Cartoon Competition”, donde compiten más de 8,000 dibujantes. Este premio se conoce como el Óscar de la Caricatura. En España recientemente se hizo acreedor al Premio Notario del Humor, otorgado por la Universidad de Alicante.
EL SELLO DE JUNCO
La exposición de Junco se ha instalado en la Sala Aifos, de la Facultad de Filosofía y Letras III. Fue inaugurada por la vicerrectora de Cultura de la Universidad de Alicante, Catalina Ilescu, y ha contado con la asistencia de Enrique Pérez, José Malagón, Antonio Ortiz Ortifus, Juli Harca, Manuel Sánchez y Nerja, todos ellos figuras de la caricatura española.
En las paredes de un espacio de unos 20 por 20 metros se han puesto 32 obras en metacrilato. Todas ellas con el sello de la maestría. El sello de Junco. Tanto así que Juli Harca, presidente de la asociación de caricaturistas españoles, en una misiva a la comunidad se refirió a Manolo como un “maestro de maestros del humor”. Y sobre la exposición dijo: “Las obras son magníficas, la exposición quedó perfecta, diáfana, espectacular”.
La trayectoria de vida de Junco, que se desenvolvió en el derecho, el teatro, la fotografía, el cine y la academia, lo ha convertido en un pozo de sabiduría que se resuelve en un artista excepcional. Es un artista que se sirve de la línea, del color y de su ausencia para burlar a la realidad, trastocando la perspectiva en un juego genial en el que su arte cobra vida.
DE SORPRESA EN SORPRESA
Sus dibujos desintegran y reintegran la imagen llevándonos al mundo de lo inconcebible, donde sorprende y encanta al espectador.
La exposición se titula: “Insight, la Razón de la sinrazón”, y sobre ella Junco dijo: “Insight es aquello que reúne unos cuantos elementos y los convierte en algo superior. Es el hilo que hace que unas palabras se vuelvan discurso, que unos ingredientes sean un guiso, que unas formas se transformen en un dibujo comprensible… Ese concepto está relacionado con la inteligencia, la razón, la lógica, y en el caso de la exposición, con su contrapunto: la sinrazón del humor”.
Junco se sirve de su extensa cultura para mirar la realidad. Y con el ingrediente mágico del humor la posee, la trastoca y la tergiversa, para mostrárnosla en dibujos que nos llevan de sorpresa en sorpresa, sorpresas que se sirven iluminadas de risa. N
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Salvador Casanova es historiador y físico. Su vida profesional abarca la docencia, los medios de comunicación y la televisión cultural. Es autor del libro La maravillosa historia del tiempo y sus circunstancias. Los puntos de vista expresados en este artículo son responsabilidad del autor.
