TRES GENERALES de Birmania al frente del golpe de Estado serán sancionados por el Reino Unido y Canadá acusados de “graves violaciones de los derechos humanos”, anunció el Ministerio británico de Relaciones Exteriores en un comunicado.
Reino Unido también informó que implementará nuevas medidas para garantizar que la ayuda del Reino Unido no se desvíe de los más vulnerables al gobierno militar.
El país impondrá la congelación inmediata de activos y prohibiciones de viaje contra el ministro de Defensa, Mya Tun Oo, el ministro de Interior, Soe Htut, y su adjunto, Than Hlaing.
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Los tres militares se suman a otros 16 miembros del ejército de Birmania que ya han sido sancionados por el Reino Unido.
La decisión de este jueves, que se ha realizado bajo el régimen de sanciones del Reino Unido en relación con Birmania, representa una nueva acción del Reino Unido junto con sus aliados para enviar un mensaje al ejército de que habrá consecuencias por sus violaciones de derechos humanos, señala el documento que advierte que las sanciones entran en vigor de inmediato.
“El ejército y la policía de Birmania han cometido graves violaciones de los derechos humanos, entre ellas el derecho a la vida, el derecho a la libertad de reunión, el derecho a no ser objeto de arrestos o detenciones arbitrarios y el derecho a la libertad de expresión”.
La sanciones para el Ministro de Defensa, general Mya Tun Oo son por su responsabilidad de graves violaciones de derechos humanos cometidas por militares.
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Para el Ministro del Interior, teniente general Soe Htut por su responsabilidad en las graves violaciones de derechos humanos cometidas por la policía, bajo este mismo cargo son las sanciones para el viceministro de Interior, teniente general Than Hlaing.
“Con nuestros aliados, pediremos cuentas a los militares por sus violaciones de los derechos humanos y para que se haga justicia con el pueblo birmano”, indicó el ministro británico de Relaciones Exteriores, Dominic Raab.
El canciller Dominic Raab dijo: “El Reino Unido condena el golpe militar y la detención arbitraria de Aung San Suu Kyi y otras figuras políticas.
“Nosotros, junto con nuestros aliados internacionales, exigiremos que el ejército de Birmania rinda cuentas por sus violaciones de los derechos humanos y buscaremos justicia para el pueblo”.
Junto con el anuncio de hoy, se están poniendo en marcha nuevas salvaguardias para evitar que la ayuda del Reino Unido apoye indirectamente al gobierno liderado por militares tras la conclusión de una revisión de la ayuda, anunciada inmediatamente después del golpe.
Se ha eliminado el apoyo a las reformas dirigidas por el gobierno y se cerrarán los programas planificados. En cambio, el gobierno pondrá en marcha medidas para garantizar que la ayuda llegue solo a los más pobres y vulnerables, versa el mismo documento. N
