Desde este 1° de abril, la mayoría de los bancos en México iniciaron con un programa de diferimiento de pago de créditos, a fin de apoyar a las personas cuya economía familiar se verá afectada de forma importante por las medidas de contención del coronavirus Covid-19.
El programa contempla que el cuentahabiente que tenga vigente algún crédito pueda suspender el pago de sus mensualidades y los intereses respectivos hasta en un plazo de cuatro a seis meses.
Algunos créditos que contempla el programa son créditos de nómina, créditos PyME, hipotecarios y automotrices, entre otros.
Entre los bancos que ofrecen el diferimiento de pago se encuentran BBVA, Banorte, Banamex, HSBC y Santander.
Sin embargo, ¿cuáles son las “letras chiquitas” del diferimiento de pagos? y ¿Quiénes serían las personas más beneficiadas con el programa?
De acuerdo al asesor del Colegio de Economistas, Gerardo Sánchez, las características del programa de diferimiento de pagos sería positivo únicamente para las personas que se hayan quedado sin empleo o que sólo percibirán el 50% de su salario, o menos, durante el periodo de contingencia.
“Hay bancos que tienen a cuatro o a seis meses este programa, pero tú puedes escoger nada más dos meses, si tú estás en una empresa y te descansan un mes con sólo el 50% del salario, entonces a lo mejor no ocupas agarrar el programa por cuatro meses, sino únicamente por uno o dos meses”, resaltó.
Una de las ventajas de adherirse al programa es que no se turnará al cuentahabiente al buró de crédito por la suspensión de pagos, añadió.
“En la banca, cuando tú te atrasas 90 días en los pagos ellos te trasladan al buró de crédito con una calificación negativa o mala, de que no pagaste en 90 días, pero tú al adherirte al programa no te mandan al buró de crédito, además de que no te cobran recargos ni intereses moratorios”, subrayó el especialista.
Aunque el diferimiento de pagos permitiría un “respiro” para la economía de algunas familias, los pagos de las mensualidades e intereses se tendría que pagar de forma íntegra una vez que concluya el plazo, por lo que exhortó a las personas que recurran a él a ser cautos al momento de adherirse al programa y contemplen bien su capacidad de pago.
“Un ejemplo de la aplicación del programa sería que tú debes 10 mil pesos a una tarjeta de crédito, y cada mes debes de pagar 200 pesos de intereses, si tú te acoges a este programa para diferir los pagos, en el mes de junio tú les vas a deber 10 mil 800 pesos”.
Por ello, llamó a las personas que aún cuenten con la capacidad financiera para pagar sus créditos a pesar de la contingencia, para que puedan saldar más rápidamente sus adeudos.
“Si tú cuentas con tu salario y tu empleo, sigue pagando la cuota mínima que pide el banco, solamente sugiero este programa para personas que hayan perdido su empleo o que les hayan reducido su salario a la mitad”, concluyó.