“Hay quienes corren con suerte” dice Elba al recordar que ella no se encuentra en esa lista de buenas historias. Su hermana murió hace dos décadas en el desierto, al menos eso cree que pasó, pues en realidad, nunca encontraron el cadáver de la joven mujer que decidió buscar en Estados Unidos lo que su tierra le negó…
Elba se refiere a la buena suerte de los demás cuando habla de aquellos que pueden “saber donde descansan” sus muertos.
“De aquí salió como todos, buscando una mejor oportunidad de vida y mejores ingresos para sostener a sus hijos pero “el coyote” –en referencia al traficante de personas- la dejó abandonada a su suerte “tal vez ella se cansó en el camino y ya nunca supimos de ella”.
Recuerda los trámites de localización de su hermana y Elba aún se sofoca de cansancio y angustia, nunca tuvo en realidad ninguna certeza de que de verdad se encontrara entre el listado de muertos en su intento de cruzar la frontera.
Las historias se cuentan por miles y por año, al menos se reciben en repatriación un promedio de 5 mil mexicanos que simplemente ya no regresaron a su país con vida pues la muerte les alcanzó en el extranjero, ya sea por causas naturales, por accidentes o por delitos cometidos en su contra.
De enero al 30 de junio del 2019, suman mil 657 hombres y 573 mujeres que han sido repatriados, de los cuales, 29 corresponden a personas originarias de Aguascalientes, mientras que 2018 cerró precisamente con la misma cifra, 29 restos de hidrocálidos enviados a este territorio por auxilio oficial, de acuerdo al último reporte del Gobierno Federal.
Además de Estados Unidos, en la lista de casos de traslados de restos por representación consular se encuentran también lugares como Alemania, Barcelona, Calgary, Costa Rica, Cuba, Francia, Guatemala, Hungría, Japón y hasta Ucrania, entre otros. Por supuesto, Estados Unidos es territorio que encabeza el número de mexicanos muertos y repatriados a sus lugares de origen.