Durante la dirección de Emilio Lozoya en Pemex se operó la compra del complejo industrial de grupo Fertinal, que generó el endeudamiento millonario de Pemex a cambio de instalaciones deterioradas.
Este miércoles la Secretaría de la Función Pública (SFP) inhabilitó por un periodo de 10 y 15 años a dos altos mandos de Petróleos Mexicanos (Pemex) del sexenio pasado.
El sancionado con 10 años es el extitular de Pemex, Emilio Lozoya, por dar información falsa en su declaración de situación patrimonial.
Un segundo funcionario fue sancionado por las irregularidades en la compra de una planta industrial de Grupo Fertinal, informó la Función Pública. Éste exalto mando deberá cubrir una sanción económica por casi 620 millones de peso.
Lee: La subasta de Pemex y la salida de Emilio Lozoya
Los orígenes de Fertinal se remontan a Fertimex, que fue propiedad del Estado, y una de las mayores productoras de fertilizantes en América Latina, desincorporadas por el gobierno de Carlos Salinas para su privatización.
En aquellos tiempos –en que precisamente su padre de Emilio Lozoya Thalman había sido funcionario público– Fertimex quedó en manos del banquero Fabio Covarrubias Piffer, quien había sido consejero y vicepresidente de Banco Unión con Carlos Cabal Peniche.
Para cuando Emilio Lozoya Austin llegó como director de Pemex, ya se sabía que Fertinal estaba en quiebra.
Algunas de las calificadoras más importantes del mundo habían revisado la situación de las plantas de ese complejo industrial y los pasivos y en sus informes destacaban deficiencias.
Aún así se le compraron mediante el millonario endeudamiento de Pemex.
La compra se operó a través de Pemex Fertilizantes, una de las áreas que se crearon a partir de la reestructura de la petrolera con la reforma energética del gobierno de Enrique Peña Nieto.
Tras la reforma, Pemex Fertilizantes fue creada como empresa productiva subsidiaria, oficialmente para la producción, distribución y comercialización de amoniaco, fertilizantes y sus derivados.
En Pemex se dijo que la petrolera reactivaría su cadena de producción de gas-amoniaco y fertilizantes, lo que sonaba muy bien, ya que son los principales insumos para la elaboración de fertilizantes nitrogenados.
Solo que lo que en realidad se hizo, fue adquirir deterioradas instalaciones.
Lee también: Pemex, Lozoya y la plataforma pirata en el Golfo de México
En 2015 en Pemex se inició el proceso para adquirir el Grupo Fertinal, S.A. de C.V. y subsidiarias (Fertinal): una compañía productora y comercializadora de fertilizantes fosfatos y nitrogenados, cuyos activos consistían en una mina de roca fosfórica ubicada en San Juan de la Costa, Baja California Sur, y una planta de fertilizantes y productos industriales en Lázaro Cárdenas, Michoacán. Su estructura corporativa estaba conformada por Grupo Fertinal, S.A. de C.V., como controladora, y nueve subsidiarias, de las cuales una estaba en bancarrota y otra sin operación desde el año 2001.
El 26 de octubre de 2015, el Consejo de Administración de Pemex aprobó el proyecto de inversión para financiar y concretar la compra de Fertinal por un monto máximo de 635 millones de dólares.
Para comprar Fertinal, en diciembre de 2015 los directivos de Pemex constituyeron una sociedad mercantil: Pemex Fertilizantes Holding, SA de CV, en la cual Pemex Fertilizantes tiene una tenencia accionaria del 99.9 por ciento, y una segunda empresa llamada Pemex Fertilizantes Pacífico, SA de CV, subsidiaria en un 99 por ciento de Pemex Fertilizantes Holding, SA de CV., con objeto de “adquirir, bajo título legal, acciones, intereses, certificados de participación, bonos, obligaciones, partes sociales y toda clase de títulos valor de cualquier clase e sociedades mercantiles, así como su enajenación”. En enero de 2016 a través de éstas se triángulo la compra.
LOZOYA OMITIÓ ADVERTENCIAS
Previo a que Pemex comprara Fertinal dos de sus consejeros habían advertido que esta transacción no era prioritaria para Pemex y que el capital de trabajo de Fertinal era negativo, así que no debía comprarse.
Peor aún, un auditor externo había realizada un estudio (la llamada Due diligence) en el que identificó y detalló todas las anomalías que tenían las instalaciones que se pretendía comprar.
Detalló que las instalaciones estaban en malas condiciones, tenían graves problemas de carácter ambiental, se requería una remediación muy costosa; la empresa arrastraba además pasivos laborales, con proveedores, derivados también de concursos mercantiles, juicios.
En síntesis que Fertinal tenía costosas contingencias legales, por costos de remediación y litigios.
Por si fuera poco, el área de Petroquímica de Pemex determinó que se necesitaría invertir 315 millones de dólares para rehabilitar plantas de Fertinal, debido a que por sus deterioradas condiciones, se requería restituir toda la parte mecánica de los equipos, que su tecnología y diseño eran obsoletos y que las refacciones estaban discontinuadas en el mercado, así que prácticamente era necesario modernizarlas para cumplir con los estándares actuales de seguridad, ambiente y confiabilidad operativa.
Aun así, en diciembre de 2015, Pemex Fertilizantes Pacífico, S.A. de C.V., como comprador, celebró el contrato de compraventa de acciones con el fiduciario vendedor, fideicomisarios vendedores, vendedor nominal y Fertinal, en el cual se estableció la adquisición de 3,742,179,6913 acciones, que representan un capital social por 3,180,815,000 pesos.
Te puede interesar: Pemex, la petrolera mexicana que cumple 80 años en medio de su peor crisis
Para financiar la adquisición, el 22 de diciembre de 2015 se firmaron dos contratos de apertura de crédito simple, mediante los cuales se obtendrían recursos hasta por 635,000,000 dólares.
Para pagar la compra de Fertinal, Pemex se endeudó con bancos mediante dos operaciones que se realizaron de la siguiente manera:
En la primera, Pemex Fertilizantes Pacífico, S.A. de C.V. (acreditada), Pemex y Fertinal (obligadas solidarias) celebraron un contrato con Nacional Financiera, S.N.C. (Nafin), institución de banca de desarrollo (agente administrativo y de garantías) y ésta con el Banco Nacional de Comercio Exterior, S.N.C. (Bancomext), institución de banca de desarrollo (acreditantes), para obtener un financiamiento y pagar en forma parcial el precio bajo el contrato de compraventa de las acciones. Dicho financiamiento por 275,000,000 dólares.
En la segunda, Fertinal (acreditada) y Pemex (obligada solidaria) celebraron un contrato con Nafin (agente administrativo y de garantías), y ésta con Bancomext y Banco Azteca, S.A. (acreditantes), para obtener el financiamiento y pagar en forma anticipada los créditos existentes. Este fue por 360,000,000 dólares.
Así, Pemex Fertilizantes Pacífico, S.A. de C.V. adquirió Fertinal el 28 de enero de 2016, con una inversión de 635,000,000 dólares, que pagó con los recursos disponibles del financiamiento.
En 2016 la Auditoría Superior de la Federación auditó la compra de Fertinal y comprobó las irregularidades. Se reconocía que Fertinal era improductiva. Pero para entonces Emilio Lozoya había dejado Pemex (salió el 8 de febrero de ese año).
La petrolera se quedó con sus deudas y con las deficientes instalaciones de Fertinal.