La reconocida empresa de relojes Movado Group incursiona en el mercado mexicano con sus destacados diseños.
GEDALIO GRINBERG amó los relojes y la relojería desde que era un niño. Nacido en Quivicán, a los 29 años huyó de su natal Cuba cuando, poco después de la Revolución, rechazó el puesto gubernamental que le ofreció el gobierno de Fidel Castro. En 1961, un año después de haberse refugiado en Estados Unidos, echó a andar una compañía relojera que primero se llamó North American Watch Company y que con el tiempo se convertiría en el poderoso Movado Group.
Considerado una leyenda de la industria, Grinberg transformó el negocio de los relojes de lujo con su espíritu pionero, el cual lo llevó a participar en la creación de la marca Piaget, en el rescate de la marca Movado y a luchar para unir a las fuerzas suizas durante la crisis del cuarzo de la década de 1970.
Hoy en día, Movado Group diseña, fabrica y distribuye relojes de 11 marcas reconocidas y respetadas en el tiempo: Movado, Ebel, Concord, Olivia Burton, Hugo Boss, Lacoste, Coach, Tommy Hilfiger, Scuderia Ferrari, Rebecca Minkoff y Uri Minkoff.
Valuada en más de 500 millones de dólares, la compañía distribuye sus productos en 50 países de América, Europa y Asia, posee fábricas en Suiza y Estados Unidos y emplea a 1,330 personas.
A la muerte de Gedalio Grinberg, en 2009, al frente de la compañía quedó su hijo mayor, quien se integró al grupo en 1980. Newsweek en Español charló con Efraim Grinberg, presidente y CEO de Movado Group, a propósito de la reciente apertura en México de una filial de la empresa, con la cual esta busca tener mayor expansión y crecimiento en el mercado latinoamericano.
—¿En qué consiste el plan de negocios de Movado Group en México?
—Nosotros creemos mucho en este mercado y tenemos un equipo muy bueno aquí. Empezamos hace un año a formar el equipo para desarrollar un negocio importante en México, y eso es lo que estamos haciendo ahora. Hoy oficialmente es el lanzamiento de la subsidiaria de Movado en México.
—¿Cuáles son los factores que consideraron para ingresar en el mercado mexicano?
—Estamos aquí ya desde hace varios años con muchos distribuidores, pero no teníamos una filial que trabajara directamente desde nuestra compañía. Vimos que había mucho potencial, pero teníamos que invertir en el mercado, y ahora, crear una subsidiaria de nosotros aquí nos da la fuerza en esta región y podemos hacer inversiones más precisas y concretas.
—¿Qué significado tiene la marca como tal? ¿Qué le va a ofrecer al mercado mexicano y latinoamericano?
—Verdaderamente ofrecemos un gran producto con marcas muy distinguidas. Todos los productos tienen la identidad de la marca. Si tú ves un producto de Hugo Boss y le quitas el nombre, sabes que es un Hugo Boss. Y si ves un Tommy Hilfiger y le quitas el nombre, sabes que es un Tommy Hilfiger, y lo mismo con Movado. Y también le ofrecemos al consumidor un gran valor en cuanto a los precios, porque también somos muy diferentes en cuanto a los niveles de los costos.
—¿Cuál considera usted que es el principal respaldo de la marca?
—Nosotros queremos formar en México un mercado muy importante para la compañía. Hoy tenemos posiciones muy relevantes en mercados como Brasil y otros países de Latinoamérica, que son regiones muy importantes para la compañía. Y ahora creemos que México puede ser otro mercado tan valioso como Brasil para nosotros.
—¿Qué distingue y hace diferente a Movado de las marcas relojeras competidoras?
—Nosotros lo que más valoramos es el diseño de los productos. Pasamos mucho tiempo diseñando los relojes y bosquejando productos que de verdad le dan un gran significado a la marca. No hay mucha gente que hace eso en este negocio.
—Es decir, una característica especial es el cuidado en el diseño…
—Sí, el cuidado en el diseño. Tenemos diseñadores muy buenos en el mundo entero, en Suiza, en Estados Unidos, y pasamos mucho tiempo analizando y mejorando esos trabajos. Debo decir que muchos de los diseños que hacemos no se fabrican, producimos solo relojes muy especiales.
—¿En términos generales cómo se encuentra hoy la industria de la relojería?
—Nosotros vemos que el negocio es muy bueno, pero lo que hay que hacer es fabricar los relojes que los consumidores quieren comprar. De verdad, trabajar en los diseños funciona muy bien, eso lo vimos en una compañía que compramos el año pasado, la cual fundaron dos muchachas de treinta y pico años, la marca Olivia Burton, que cinco años después era la marca más grande de relojes de lifestyle para mujeres en Inglaterra. Desde esa perspectiva, vemos que todavía queda mucho potencial por explotar en esta categoría.
—¿Cuáles considera que son los retos principales de la industria relojera frente a los tiempos venideros?
—Yo creo que ahora la economía del mundo está mejorando, y eso es muy bueno. Siempre hay grandes retos, pero no hay nada especial o que sea imposible. Lo único que yo veo hoy es que el cambio entre las tiendas convencionales y las tiendas en línea está siendo un poco más complicado, pero las tiendas aún hacen cosas muy interesantes para ir a visitarlas, la gente todavía sigue visitando las tiendas.
—¿Cómo se mueven estos productos en el mercado nuevo, sobre todo el digital?
—Es muy importante para Movado Group el negocio digital, pasamos mucho tiempo trabajando en esa industria. Estamos poniendo mucha gente en la parte del mercado digital y los sitios de internet porque todo eso es muy importante.