La contaminación ambiental es el mayor desafío para la salud pública mundial. Nueve de cada 10 personas en el mundo respiran aire contaminado, provocando la muerte de 7 millones de personas cada año, informó este martes la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los esfuerzos para disminuir los daños que provocados por la polución no han dado frutos. El 92 por ciento de la población mundial, “respira aire contaminado en unos niveles muy peligrosos para la salud”, denunció en teleconferencia la directora de Salud Pública y Medio Ambiente de la OMS, María Neira.
Los niveles de contaminación se han mantenido estables en los últimos seis años, con pequeñas mejoras en Europa y las Américas, según las investigaciones de la organización.
La agencia sanitaria de la ONU advirtió que la contaminación de partículas finas penetra profundamente en los pulmones y en el sistema cardiovascular, causando enfermedades potencialmente mortales como derrames cerebrales, ataques al corazón, obstrucciones pulmonares e infecciones respiratorias, incluyendo neumonía, que es una de las principales causas de muerte de los menores de 5 años.
La OMS considera que la contaminación es un factor de riesgo esencial en muchas enfermedades no transmisibles, y está directamente relacionada con un 24 por ciento de las defunciones por dolencias cardíacas; un 25 por ciento de los decesos por apoplejías; un 43 por ciento de los fallecimientos por obstrucción de las vías respiratorias; y un 29 por ciento de los óbitos por cáncer de pulmón.
La polución ambiental causó la muerte de 4.2 millones de personas en 2016, mientras que la contaminación interior del hogar estuvo directamente relacionada con 3.8 millones.
La suma de estos decesos es de 8 millones, dado que la OMS estima que un millón se debieron por inhalación de aire contaminado tanto en el hogar como en el exterior.
Sin embargo, la actividad humana no constituye la única fuente de polución del aire. Las tormentas de arena, en particular en las regiones situadas a proximidad de un desierto, tienen también una influencia en la calidad del aire, según la OMS.
“La contaminación del aire nos amenaza a todos, pero son las personas más pobres y más marginadas la que llevan el mayor peso”, declaró el director general de la OMS, el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, citado en un comunicado.
“No se puede aceptar aceptar que más de 3,000 millones de personas ––sobre todo mujeres y niños–– sigan respirando todos los días humos mortales emitidos por hornos y combustibles contaminantes en el interior de sus viviendas”, agregó.
Las conclusiones de la OMS se apoyan en la calidad del aire registrada en más de 4,300 ciudades de 108 países (1,000 ciudades más que en el informe anterior).
Según el informe, más de 90 por ciento de las muertes vinculadas a la polución tienen lugar en los países con ingresos bajos o medios, principalmente en Asia y en África.
Las estadísticas muestran también que los lugares en que los niveles de polución del aire son más altos se hallan en Oriente Medio, en el norte del África y en el sureste de Asia, con medias anuales de contaminación que superan a menudo en más de cinco veces los límites fijados por la OMS.
Después, las más afectadas son las ciudades con ingresos bajos o medios de África y del Pacífico occidental.
(Con información de AFP)