

Hace 31 años, Aguascalientes buscaba un motivo para atraer visitantes más allá de su Feria Nacional de San Marcos. Fue entonces cuando un grupo de visionarios —Fernando del Moral Muriel, la Sra. Alicia Romero de Andrea y el Arq. José Luis García Ruvalcaba— imaginaron un evento que diera vida a nuestras calles en otoño y rindiera homenaje a la genialidad de José Guadalupe Posada.
Con el impulso del sector hotelero y el respaldo del Gobierno del Estado, nació el Festival Cultural de Calaveras, inspirado en el Cerro del Muerto y en la calidez de su gente. Su lema original, “México tiene un corazón, Aguascalientes tiene un corazón: su gente”, marcó el inicio de una tradición que hoy nos define.
Lo que comenzó como una apuesta por el turismo cultural, hoy es el segundo festival más importante de México: un emblema que celebra el arte, la identidad y el espíritu que nos une entre la vida y la muerte.
Durante la presentación, Fernando del Moral Muriel, uno de los fundadores del festival, reconoció y felicitó al secretario de Turismo, Mauricio González López, por el fortalecimiento y crecimiento que ha tenido el Festival Cultural de Calaveras. Destacó que hoy este evento se consolida con fuerza y autenticidad, impulsando al sector turístico, generando una importante derrama económica y, sobre todo, regresando a sus raíces en el corazón del centro de Aguascalientes, donde todo comenzó.