La Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad (ENPOL) 2016 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), reportó que los custodios de las cárceles de Nuevo León reciben 62.8% de los pagos ilegales que efectúan los internos para obtener un servicio, bien, beneficio o permiso.
La ENPOL 2016 detalló que en los penales se paga por poseer un aparato eléctrico, por cambiar de celda y protección al interior del centro penitenciario. Los pagos que reciben los custodios son por permitir que los internos tengan una cama colchoneta o cobijas o para que reciban una visita conyugal.
El pasado 23 de febrero, reos de los penales de Topo Chico y Apodaca protestaron y denunciaron corrupción al interior de los penales por lo que exigieron la destitución de mandos penitenciarios.
Dos días después de la protesta el gobierno neoleonés informó que la Comisaria de Administración Penitenciaria, Rosa Manuela Félix, renunció a su cargo “por motivos personales”. También informó el cese de Genaro Arturo Sánchez como alcaide del Centro de Prevención y Reinserción Social Topo Chico.
Ambos eran mencionados en las mantas que los reos exhibieron el día de las protestas.