Rodrigo Duterte afirmó: “No te mataremos. Sólo te dispararemos en la vagina… Si no hay vagina, serían inútiles”
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, declaró en una reunión con exguerrilleros que las Fuerzas Armadas del país deben disparar hacia “la vagina” de las mujeres rebeldes y afirmó que, si no tienen vagina, son inútiles.
Durante reunión con antiguos militantes del Nuevo Ejército del Pueblo, una guerrilla comunista señalada como terrorista en Estados Unidos y la Unión Europea, el jefe de estado declaró: “Díganle a los soldados: hay una nueva orden. No te mataremos. Sólo te dispararemos en la vagina… Si no hay vagina, serían inútiles”.
La Oficina de Comunicación Presidencial incluso agregó este comentario en la transcripción oficial del evento aunque reemplazó la palabra “vagina” con tres guiones.
Su comentario fue calificado como “misógino” por Human Rights Watchs, quien señaló que Duterte “está incitando a las fuerzas estatales a cometer actos de violencia sexual durante los conflictos armados, lo que constituye una violación del derecho humanitario internacional”.
Por su parte, la organización feminista filipina Gabriela señaló en un comunicado que el mandatario “fomenta abiertamente la violencia contra las mujeres, contribuye a su impunidad y se confirma como el macho fascista más peligroso en el Gobierno en este momento”.
Duterte, elegido como presidente en 2016, es conocido por haber lanzado una polémica “guerra contra las drogas” que ha causado la muerte de casi 4,000 presuntos traficantes y usuarios de droga a manos de la policía –aunque organizaciones señalan que son más de 12,000– y las autoridades investigan también más de 2,000 asesinatos “relacionados con las drogas” cometidos por desconocidos.
La Corte Penal Internacional (CPI) anunció el jueves pasado que examinaría la situación en Filipinas ante los “crímenes presuntamente cometidos” en el marco de esta campaña, a lo que Duterte contestó que está fuera de su jurisdicción porque, dijo, la legislación local no prohíbe específicamente las ejecuciones extrajudiciales.
Esta no es la primera vez que el presidente filipino es criticado por comentarios considerados sexistas y misóginos. Antes de llegar a la presidencia, en junio de 2016, desató fuertes protestas por contar un chiste sobre una monja australiana violada y asesinada en un motín en una prisión en 1989 y más recientemente se mostró dispuesto a ofrecer “42 vírgenes” a cada turista que visitara Filipinas.
Sin embargo, cuando el mandatario es cuestionado, explica el diario The Washington Post, insiste en que se trata de un chiste. La semana pasada, su vocero Harry Roque acusó a las mujeres de sobrerreaccionar a los comentarios del presidente. “Quiero decir, eso es gracioso. Venga. Solo ríete”, dijo Roque.
