Carlos Emilio Galván Valenzuela, joven de 21 años originario de Durango, fue reportado como desaparecido tras perder contacto con su familia la madrugada del domingo 5 de octubre en el puerto de Mazatlán, Sinaloa.
De acuerdo con la declaración de su madre, Brenda María Valenzuela, el joven se encontraba de viaje con su familia paterna y acudió al bar Terraza, Valentinos. Cerca de las 2:00 de la mañana, Carlos Emilio se dirigió al baño del establecimiento y ya no regresó con sus acompañantes.
Sus familiares, entre ellos su padre, tíos y primos, aseguraron que durante su estancia en el puerto no tuvo conflictos ni situaciones fuera de lo común. Su madre lo describió como un joven sano, deportista y recién egresado de la carrera de Gastronomía.
La madre pidió a las autoridades de ambos estados atender el caso con urgencia. La familia presentó la denuncia formal el lunes 6 de octubre ante la Fiscalía de Sinaloa y la Fiscalía General del Estado de Durango, esperando que la coordinación entre ambas dependencias permita ubicar su paradero.
En torno al caso, el gobernador de Durango, Esteban Villegas Villarreal, informó que su administración mantiene comunicación constante con la Fiscalía de Sinaloa y con el gobierno federal para agilizar la búsqueda.
“Ojalá que lo puedan rescatar con vida, que regrese a su casa; es un joven duranguense, tiene familia. Me imagino lo que están viviendo su mamá y su papá, y tienen todo mi apoyo”, expresó.
El mandatario aclaró que las autoridades de Durango no pueden intervenir directamente en la investigación, ya que los hechos ocurrieron fuera de su jurisdicción, aunque dijo que se mantiene insistiendo ante las instancias correspondientes para que no se detenga la búsqueda.
Cuestionado sobre si recomendaría a los duranguenses viajar a Mazatlán, Villegas evitó emitir una advertencia formal, pero reconoció que, aunque el puerto suele ser un destino tranquilo, casos como el de Carlos Emilio reflejan que existen riesgos que no deben minimizarse.
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